El pasado 08 de diciembre, la BBC de Londres compartió: “La geopolítica actual va mucho más allá de los límites geográficos concretos para convertirse en el ejercicio de un geopoder con ambiciones universales. Se materializa en la permanente rivalidad por el control de toda la humanidad. Y la forma mejor, la más completa, de lograr dicho control es actuar sobre la mente de las personas, lo que hoy es más sencillo que nunca gracias a las nuevas tecnologías". Nos dijo que, así comienza ´El Dominio Mental´ el nuevo libro del experto en geopolítica Pedro Baños” y, esto que se puede ubicar en la ficción, en realidad se convierte en una verdad indiscutible. Ante la ausencia de una legislación adecuada, los algoritmos que controlan las llamadas redes sociales, nos han demostrado lo afirmado por Baños. Basta con “ponerle un like” 150 veces a una publicación de tu agrado, para ipso facto se identifiquen tus gustos y así, te liguen a una indefinida cantidad de páginas, anuncios, promociones de tus preferencias. Las llamadas granjas de bots (deriva de robots) son las encargadas de guiarte en aquello que buscas; así, también está demostrado que el 90% de las personas siguen o indagan todo aquello que les satisface, desechando lo que no es de su agrado o bien, amparados en el anonimato, ofenden, atacan e intentan denostar, creencias políticas o religiosas con las cuales no congenian y con todo esto, se han ido apoderando de nosotros y los ejemplos serán perceptibles en la etapa electoral que se avecina. Continúa Pedro Baños: “Porque quien consigue controlar nuestra mente consigue el poder". Su libro plantea: ¿Realmente podemos ser dominados a través de la mente? Sí, con rotundidad. Hay que pensar que ese conjunto formado por la mente y el cerebro —hablaríamos tanto de la parte etérea como de la parte física— es nuestro centro de mando, donde se regula absolutamente todo.

Con su reconocida amenidad y lucidez, Pedro Baños aborda en El Dominio Mental con un perturbador porvenir —que, en muchos sentidos, ya es plenamente actual— desde múltiples perspectivas: la manipulación cultural y psicológica, la (de)formación de las voluntades personales, el control de la información y también las posibilidades que se abren con la evolución de las neurotecnologías o la inteligencia artificial en todos los campos, incluido el militar. (Continuará).

Especialista en Derecho del Trabajo, certificado por el Notariado de la Unión Europea

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