A propósito de la revocación de mandato, la primera en nuestro país, es importante dar a conocer a la ciudadanía que, actualmente están en curso diversas actividades y restricciones en torno a este proceso de participación. Por un lado, el Instituto Nacional Electoral, como órgano del estado encargado de ejecutar los procesos electorales federales, ha desplegado un operativo muy importante en todo el territorio nacional para asegurar el derecho que tienen 91 millones de electores para decidir si el presidente Andrés Manuel López Obrador es revocado o no del cargo por la pérdida de confianza.
Por otro lado, es importante señalar que existe la restricción para las autoridades gubernamentales de los tres órdenes de gobierno, así como para miembros del poder legislativo, de suspender toda aquella publicidad que no tenga que ver con aspectos de protección civil, seguridad pública, educación y salud. Una medida precautoria que en caso de no atenderse pudiera eventualmente incidir en la equidad del proceso, mismo que si bien no es una elección en sí, tiene las características formales de un proceso electoral.
Es así que, el INE es la única autoridad encargada de difundir la información concerniente al proceso de revocación de mandato. Por tal motivo, desde el pasado 9 de febrero y hasta el 6 de marzo, estará desdoblando un esfuerzo sin precedentes para que por medio de 1 mil 512 supervisores electorales y 10 mil 557 capacitadores asistentes electorales se visite a la ciudadanía que resultó sorteada y cuyo criterio de insaculación fue haber nacido en el mes de mayo o contar con la letra B en su primer apellido.
Es crucial la participación de la ciudadanía para poder celebrar con éxito esta fiesta de la democracia, pues para que nuestros procesos electorales sigan sirviendo de ejemplo internacional, se debe lograr convencer a 285 mil ciudadanas y ciudadanos en todo el país, pues se requiere la instalación de 57 mil mesas directivas de casilla de revocación de mandato, las cuales se integran por un presidente, un secretario, un escrutador y dos suplentes generales. De este modo, el reto es mayúsculo, pues como es sabido, la democracia no se genera espontáneamente ni se da en maceta, es por ello que se debe alentar día con día.
No olvidemos que desde el momento que solicitamos voluntariamente nuestra inscripción en el padrón de electores, adquirimos derechos aparejados de obligaciones, uno de ellos es por supuesto votar el próximo domingo 10 de abril, pero otra, es participar en el llamado del INE en caso de ser seleccionado y visitado por el personal. El edificio de la democracia se corroe con el ambiente, pero se restaura con demócratas.
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