Quien no conoce o no aprende de los errores del pasado está condenado a repetirlos. Una de las mayores enseñanzas de la historia es que las concentraciones de poder en una sola persona llevan siempre a destinos trágicos: Grecia, Roma, la Alemania Nazi, la Italia de Mussolini, Luis XVI en Francia, Agustín Iturbide en México, López de Santa Anna y Porfirio Díaz, sirven para ejemplificar que centrar el poder en un sólo par de manos puede ser sumamente riesgoso para cualquier nación.

El ejercicio y la evolución en la función de gobernar han llevado a excesos de poder, sobre todo por parte de los titulares del Poder Ejecutivo federal: inconsistencias en las elecciones, que llevaron a la creación del Instituto Federal Electoral, ahora Instituto Nacional Electoral (INE); crisis económicas, que llevaron a la creación del Banco de México como organismo autónomo; opacidad y falta de transparencia, que llevaron a la creación del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales; abusos de empresas y monopolios, que llevaron a la creación de la Comisión Federal de Competencia Económica.

Hoy, se colocan en la mira del Poder Ejecutivo la Comisión Nacional de Derechos Humanos, el Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación y el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, entre otros organismos autónomos.

A través de recortes presupuestales la transformación de cuarta ha ido debilitando a estas instituciones, al punto de hacerlos económicamente insostenibles. La 4T y Morena han demostrado que no les gusta la transparencia, sino que les gusta la opacidad; tampoco les gusta rendir cuentas, pues les gusta reservarse para sí mismas toda la información, como la del impacto ambiental del Tren Maya y de la refinería de Dos Bocas o la del estudio técnico de viabilidad del aeropuerto de Santa Lucía entre muchos otros temas.

Hoy se está emprendiendo un ataque en contra del INE, debido a que el presidente Andrés Manuel López Obrador asegura que este órgano permitió que le robaran dos elecciones. El mismo INE que ratificó a AMLO como jefe de gobierno y como Presidente de la República, hoy se encuentra bajo asedio; un órgano que representa un ejemplo a nivel internacional en la organización de elecciones y confiabilidad de las mismas, le estorba porque le pone frenos a su eterna campaña.

Presidente no justifique su intención de captura y concentración del poder en la austeridad. Fuera máscaras, no más simulaciones. #MorenaMiente

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