En lo que va del año, se han presentado ante la Secretaría de Desarrollo Sustentable (Sedesu), alrededor de 300 solicitudes de impacto ambiental, lo que representa la misma cantidad de proyectos inmobiliarios, los cuales contemplan desde desarrollos industriales, habitacionales, comerciales y todos aquellos que cuentan con una extensión de más de cinco mil metros cuadrados.
Marco Antonio del Prete Tercero, titular de la Sedesu, detalló que son proyectos en desarrollo y que indican crecimiento en la entidad, pues si bien “no generan un flujo inmediato, se está generando valor en la construcción”, particularmente en los municipios de Querétaro, El Marqués, Corregidora y San Juan del Río.
De acuerdo con datos de la dependencia, la Autorización de Impacto Ambiental la deben de obtener los proyectos para la realización, suspensión, ampliación, modificación, demolición o desmantelamiento de obras o actividades públicas o privadas que puedan causar desequilibrios ecológicos, por rebasar los límites y condiciones señalados en las normas aplicables.
“Se requieren de la Evaluación del Impacto Ambiental y su autorización por la Secretaría de Desarrollo Sustentable, de manera previa a su ejecución, en la cual se establecerán las medidas a que se sujetarán las obras o actividades a realizar”, precisa la Sedesu.
Del Prete dijo que el sector inmobiliario en Querétaro representa 36 mil millones de pesos del PIB estatal; es decir, una aportación de 10% de éste.
Pese a que empresas del sector inmobiliario han señalado que la entidad presenta sobre oferta de vivienda con un valor mayor a los 2.5 millones de pesos, el funcionario descartó que el sector haya entrado en una meseta de crecimiento, si no que continúa al alza.