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“Las secuelas de la crisis de 2008”

“Las secuelas de la crisis de 2008”
16/09/2014 |23:46
Redacción Querétaro
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La situación continúa siendo difícil para países europeos, por lo que en el ámbito internacional aún hay que vencer desafíos de letargos económicos para que el crecimiento mundial vuelva a darse en niveles más altos y más rápidos.

En entrevista con EL UNIVERSAL, el director general de Moody’s México, Alberto Jones Tamayo, dijo que para ciertos países se puede hablar de un tiempo perdido porque no se ha logrado recuperar el crecimiento económico y los empleos que tenían antes de la crisis financiera de 2008.

No obstante, México se ha visto beneficiado por esta crisis, la cual permitió un mayor crecimiento económico y una mayor creación de empleo durante el periodo 2010-2012, y con las reformas estructurales en proceso, la situación será aún mejor.

Si bien los cambios constitucionales, especialmente en el sector energético, han generado grandes expectativas, la calificadora no piensa subir la nota de México durante los próximos dos años, debido a que se tienen que analizar ciertos efectos en el crecimiento de la economía del país.

¿Qué requiere México para que tenga una calificación similar a la de Chile, que es el país mejor calificado de la región?

Conforme a nuestra metodología, México ya tiene hoy en día un rango de calificación que va desde A3 hasta A1. Su calificación asignada es A3, pero dada sus características podría estar en A2 o A1.

¿Entonces, por qué está en A3 y no en las otras dos calificaciones que son más altas?

Digamos que se tiene que verificar en la realidad un incremento importante en el PIB per cápita y que muy seguro eso va a estar derivado de tasas sostenibles en el tiempo de un mayor crecimiento económico.

Eso todavía no ocurre. Creemos que eso va a poder ocurrir quizá dentro de dos o tres años que el país empiece a crecer cerca de 3.5% o más, pero eso todavía no acontece y mientras el PIB per cápita no se incremente de manera importante, y no se detone una hoja en la inversión y la formación de capital fijo en México, no podemos pensar en un aumento en la calificación por el momento.

Estamos cumpliendo casi seis años de la crisis de 2008, ¿cómo evalúan la situación actual de México y de la economía mundial?

Han ocurrido muchas cosas muy importantes. Creo que se aprendieron grandes lecciones de la crisis mundial que comenzó en septiembre de 2008 y probablemente podríamos decir que la tormenta y la turbulencia que se desencadenó especialmente a nivel soberano y bancario, debe haber durado hasta finales de 2011. Eso nos dio muchas lecciones a todos los inversionistas en el mundo y a las autoridades, el hecho de que los gobiernos soberanos no necesariamente tienen la capacidad de afrontar una crisis verdaderamente sistémica y que, por lo tanto, el subsidiar, rescatar o salvar a bancos o a empresas, es algo que el mundo ya no debe de contar.

Creo que hoy en día hay mejores condiciones para que el crecimiento y el financiamiento se hagan de una manera mucho más racional y con datos más conocidos. Hasta antes de la crisis financiera de 2008, todo el mundo suponía que los gobiernos soberanos y las autoridades monetarias de los países tendrían bolsillos profundos para poder respaldar a todos los que entraran en crisis. Naturalmente eso no es así.

¿Considera que ya se recuperó el terreno que se había perdido, o todavía hay rezagos en la economía internacional y mexicana?

En la economía internacional, particularmente en la europea y algunos otros países, todavía tienen que vencerse desafíos de letargos económicos, es decir, un crecimiento que no termina de consolidarse y, además, es muy lento. Esa situación todavía no se resuelve. Las tasas de interés están en sus mínimos históricos y, por supuesto, que no es en ningún momento cercano que las tasas van a empezar a subir, porque todavía no se dan las condiciones. Todavía vivimos el mundo de la post-crisis financiera de 2008 y aún hay letargo económico.

¿Cuánto tiempo tardaría o faltaría para que se recupere la economía internacional y mexicana?

La mexicana no corresponde a lo que ocurrió en 2008. La economía mexicana se benefició durante 2010, 2011, 2012, particularmente del repunte gradual de la economía estadounidense, pero también de los precios internacionales del petróleo. Entonces, a México no lo podemos poner en la misma categoría de países que continúan con una situación de lento crecimiento económico derivado de la crisis, pero la buena noticia es que EU, que sí es muy importante para el crecimiento del mundo, ha comenzado a dar signos cada vez más consistentes de un mejor dinamismo de su economía. Esto es lo que probablemente en el transcurso de algunos años se traduzca en condiciones más normales de actividad económica.

¿Podemos hablar de una década pérdida en el sentido del crecimiento económico y de generación de empleo?

No se si se puede hablar de periodos de tiempo perdidos. Obviamente en algunos casos de países de Europa, sí es muy severo y ahí sí sin duda se puede avalar periodos de tiempo perdidos porque recuperar los niveles de empleos que se tenían antes de la crisis, va a tomar mucho tiempo. No podríamos decir esto para los 20 principales países del mundo. No podemos hablar de que todo se perdió. México creció en promedio a 4% entre 2010 y 2012.

Por regiones, ¿dónde se observa el mayor problema por la crisis?

Países como España, Grecia, Portugal, la propia Turquía que está pasando por desafíos, aunque su situación crediticia es mejor, todavía tienen que remontar. Hay países con focos amarillos, como India. ¡Y qué decir de Argentina y Venezuela!

Se presentó hace unos días el presupuesto federal para 2015. ¿Qué opinión tiene al respecto?

Creo que es el regreso a la normalidad. Debemos esperar niveles de inversión pública y un desempeño mucho más fluido del gasto y de su ejecución. En el país probablemente empecemos a ver el comienzo de las inversiones que se derivan de la agenda de reformas de manera incipiente el año próximo. Eso es lo que podemos ver y sin duda probablemente un mejor nivel de actividad por lo que se refiere al consumo privado que arroje mejores datos de crecimiento.

¿Qué opina sobre las proyecciones que se presentan en el presupuesto? ¿Le parecen sustentables con las expectativas?

Sí. La necesidad de la realización de muchos proyectos de infraestructura, los que se han mencionado, por supuesto que son importantes para el país y, en ese sentido, sí son sustentables porque van a agregar valor económico y, por tanto, son financiables.

¿Tienen más expectativas con la economía en el próximo año?

No. Todavía será un año de transición y sí vemos que se detone alguna mejora con relación al lento crecimiento que se ha vivido en los últimos dos años, pero no es por causa del presupuesto que se podría tener mayor crecimiento o no. Depende de cómo se comporten el consumo y la inversión.

¿El 3.7% de crecimiento económico previsto para el próximo año es alcanzable?

Nosotros no hacemos pronósticos económicos. Tomamos algunos datos de referencia y creemos que ese dato puede ser un dato referente, no sé si será 3.7%, 3.5% o 3.4%.

¿Las reformas tendrán un impacto real en la economía del país, la generación de empleo?

En el mediano plazo, sin duda. No cabe duda que así será. En función de ello fue que elevamos en febrero la calificación de México al nivel A3.

¿Fue la principal razón por la que se adelantaron?

La principal razón fue por el track record del manejo gubernamental de las finanzas en nuestro país durante más de 20 años. Eso, acompañado de una agenda muy ambiciosa de reformas, es lo que permitió lograr el avance.

¿El actual sistema fiscal mexicano es el idóneo para la generación de inversiones y empleos?

Las inversiones se llevan a cabo en función de la conveniencia económica de los proyectos en sí mismo. Un país que necesita constantemente que el fisco dé incentivos para invertir, pues es un país que nunca va a llegar a buen puerto. Puntualmente se pueden tener incentivos. De hecho, el gobierno actual en algunos sentidos da incentivos especialmente para las muy pequeñas empresas, pero esperar que la inversión privada se dé solamente por causa de incentivos fiscales, es un país que se encuentra en problemas y no me parece que sea el caso de México.