La propuesta de eliminar el régimen de consolidación fiscal restará competitividad a las empresas, reducirá sus planes de inversión y desincentivará la generación de empleos formales, anunció la firma de consultoría PWC.
En conferencia de prensa, el socio de impuestos de la empresa, Gabriel Reyes, dijo que este esquema aún es atractivo para los inversionistas nacionales como extranjeros y que en la actualidad hay 400 grupos que se benefician de este régimen.
De acuerdo con los cálculos del Presupuesto de gastos fiscales de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el gobierno recaudará 22 mil millones de pesos por año con la medida.
Por ello, en la consultoría sugirieron que a esta medida se le acompañe con el diseño de un esquema de transición que entre algunos aspectos respete el régimen de pago del ISR diferido por consolidación de derivados de la reforma al régimen en 2010.
Asimismo, propusieron considerar una salida paulatina del régimen, consolidando plazos que hay para determinar el entero del ISR diferido por consolidación.
Adicional, el fiscalista de PWC expuso que es necesario un régimen sustituto que genere competitividad, claridad y sencillez en su aplicación, que promuevan ciertas ramas de las industrias de acuerdo con la política económica de crecimiento del país y que sea un efecto temporal.
Reforma hacendaria
A meses de que inicie la discusión sobre la reforma hacendaria en el país, el socio de impuestos de PWC, Pedro Carreón, expuso que es necesario mejorar la captación tributaria y llevarla a 18% como proporción del Producto Interno Bruto (PIB).
México sólo obtiene 10% en ingresos tributarios. Es por ello que entre las propuestas está la disminución en el ISR y la homologación del IVA, pues ese impuesto es fácil de fiscalizar y difícil de evadir, señaló el especialista.