A partir de este año, los usuarios de tarjeta de crédito que recurren al pago mínimo, tendrán que abonar más, a fin de evitar que se eternicen las deudas y el cliente termine por pagar varias veces más de lo que pidió.
Verónica Porte Petit, directora operativa de Educación Financiera Banamex, explicó que esta nueva regulación es un beneficio directo para quienes utilizan las tarjetas de crédito, sin embargo, “muchas personas se confunden y siguen abonando sólo el pago mínimo en sus cuentas”.
El aumento en el mínimo, dijo, le permitirá mantener su historial crediticio limpio y le abrirá la puerta a futuros préstamos.
José María Aramburu, director general de Evaluación y Vigilancia en la Condusef, explicó que si usted es del 80% de las personas que pagan el mínimo en sus cuentas, se eternizará con su deuda y pagará hasta cinco veces el valor del producto.
Consideró que con esta nueva regulación la economía de los mexicanos mejorará, ya que terminará de pagar su deuda en cuatro años, contrario a lo que sucedía años anteriores, cuando se ataba a un banco por más de 20 años, lo que afectaba sus finanzas.
José María Aramburu reiteró que esta modificación “no será contraproducente y beneficiará a las personas”, y ejemplificó que si usted tiene una deuda de 30 mil pesos, su pago mínimo aumentó 53 pesos y pasó de 419 pesos a 472 pesos.
“El esfuerzo es poco para el bolsillo de las personas, pero a la larga beneficiará al 80% de los que optan por este beneficio”,expresó.
Javier Velázquez, codirector general de la reparadora de crédito Resuelve tu Deuda, explicó que hasta el momento no hay un incremento en la tasa de morosidad con el aumento en el pago mínimo de las tarjetas de crédito, “se mantiene el mismo nivel que en 2012, lo que es una buena noticia”.
Sin embargo, los especialistas coincidieron en que las consecuencias del aumento se reflejarán en algunos años, cuando los servicios incrementen su precio y las personas no puedan fondear sus pagos mensuales, y con ello la cartera vencida de los bancos podría elevarse.
Ángel González Badillo, director general de la Asociación Nacional de la Defensa del Deudor, detectó que el problema fue que no se dio aviso a tarjetahabientes con anticipación, lo que provocó que los tomara por sorpresa y desbalancearan su presupuesto. “No hay cultura de leer letras chiquitas en estados de cuenta, las personas no los revisan a conciencia”.