Mexicana de Lubricantes (MexLub), una coinversión entre Pemex Refinación e Impulsora Jalisciense, registra un pasivo fiscal cercano a 450 millones de pesos que pretende pagar la empresa de forma diferida a la Secretaría de Hacienda. De acuerdo con el Acta del Consejo de Administración de MexLub, en la sesión que se realizó el 14 de marzo, se reconoce un adeudo fiscal de la nueva empresa que nació a partir del acuerdo del 21 de septiembre de 2012 entre Pemex Refinación e Impulsora Jalisciense, en el llamado “borrón y cuenta nueva”. “La compañía sigue reconociendo ISR como provisión de impuesto diferido, ya que es el impuesto que pretende pagar a futuro”, destaca el documento cuya copia tiene EL UNIVERSAL. Otro de los temas importantes que se trató en la asamblea es la solicitud hecha al Comité de Auditoría para conocer los límites de endeudamiento de MexLub. “El Comité de Auditoría revisó el presupuesto anual para 2013 aprobado por el Consejo de Administración (…) y como resultado de este estudio el Comité opina que el monto de endeudamiento de la Sociedad es de 590 a 600 millones de pesos”, señala el acta del Consejo de Administración de MexLub. El documento informa que la Asamblea de Accionistas se realizó para poder protocolizar y dar validez a todos los acuerdos que se firmaron el 21 de septiembre de 2012 con Pemex Refinación. Además buscan que se pueda poner en marcha un Comité Especial que se constituyó para que durante los siguientes seis meses verifique e informe que se cumple con el convenio marco firmado con Pemex. La empresa señala que su utilidad fue de 95.3 millones de pesos en 2012 y a pesar de ese nivel acordaron que en 2013 invertirán en publicidad y recordatorios de marca 61.9 millones de pesos para poder entrar en el “top mind” de los consumidores. Además, determinó que realizarán una acción especial de vender por debajo del precio de mercado o con un costo muy competitivo a fin de poder contrarrestar las ofertas que harán otras compañías en el mercado.