Una de las acereras mexicanas más importantes, Altos Hornos de México (AHMSA), va a abrir una línea de negocios nueva: la venta de turbosina o gas avión en aeropuertos.
Hace días, AHMSA recibió un permiso provisional de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) para vender combustibles en aeródromos. Hasta ahora, este tipo de permisos sólo se venían entregando a Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), empresa estatal que domina el mercado nacional.
ASA dispone de 60 permisos para el mismo propósito, otorgados desde el 17 de diciembre de 2015.
Esos permisos le permiten a la paraestatal cubrir las necesidades de combustibles aéreos en todo el Sistema Aeroportuario Mexicano, estimadas en 3 millones 853 mil litros anuales, de los cuales, 750 mil litros son distribuidos en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México; 500 mil los absorbe el grupo aeroportuario Asur; 448 mil por GAP, y 225 mil por OMA, entre los más importantes.
Los principales clientes de ASA lo conforman 30 aerolíneas, 10 de las cuales las más importantes son: Aeroméxico, Volaris, Interjet, Aeromexico Connect, United Airlines, Vivaaerobus, Delta Airlines, American Airlines, Lufthansa e Iberia.
De acuerdo con los registros de la CRE, otras empresas han recibido permisos similares (provisionales) entre ellas Servicios Estatales Aeroportuarios y Sociedad Cooperativa de Servicios Aéreos ADN.
AHMSA ingresó la solicitud a la comisión el 18 de diciembre de 2015 y 13 días después pasó a pleno del organismo para su análisis.
En su página web, la CRE señala que otorgó el permiso provisional a la acerera Altos Hornos de Méxicoy debe cubrir ciertas condiciones para obtener el permiso definitivo.
La actividad en la que pretende incursionar AMHSA incluye instalaciones de recepción y entrega de combustibles; unidades vehiculares para el despacho de combustibles y laboratorios para la revisión del producto, compromiso de inversión, entre otras.
