Como parte de la gira de conciertos por los municipios que la Orquesta Filarmónica del Estado de Querétaro inició a finales del año pasado y que retomó esta semana, la OFEQ brindó este martes dos conciertos: uno en Huimilpan y otro en Tequisquiapan.
Por la mañana se presentó en la iglesia de San Pedro, en el municipio de Huimilpan, donde los habitantes asistieron para disfrutar de un repertorio musical que incluyó obras de Wolfgang Amadeus Mozart, Blas Galindo, Benjamin Britten y Piotr Ilich Tchaikovsky.
Ya por la noche, la sede fue la Parroquia de Santa María de la Asunción, en el municipio de Tequisquiapan, donde se contó con la participación de una camerata de instrumentos de cuerda: violines, violas, violonchelos y contrabajos, para deleitar a más de 800 asistentes durante casi una hora.
Por su parte, Melissa Soto Gómez, directora de Turismo municipal señaló que el presidente municipal de Tequisquiapan, Toño Mejía, ha contribuido para impulsar este tipo de eventos para recuperar los valores y la cultura de las familias del municipio.
“Tequisquiapan tiene una gran trayectoria artística desde hace muchos años, tanto los que han nacido en nuestro hermoso pueblo como todos aquellos artistas que decidieron venir a vivir aquí, con las bellas artes rescataremos nuestra identidad y nuestros valores”, señaló.
La gira reinició el pasado lunes en San Juan del Río y continuará hasta el próximo lunes 14 para completar el plan establecido, en el que se contemplan 12 municipios, entre los que también se encuentran Ezequiel Montes y Cadereyta, a los que llegarán hoy.
Luego continuaran en Tolimán y Colón el día viernes, para finalizar el lunes en San Joaquín, Peñamiller y Pinal de Amoles.
Esta gira cumple con la intención de acercar la orquesta al público que no siempre tiene la oportunidad de escuchar música clásica, como parte de las iniciativas creadas por el director titular de la OFEQ, Ludwig Carrasco.
“Tenemos que acercar la Orquesta al público de una manera en que puedan entender cómo funciona, qué instrumentos son, cómo suenan, para que puedan tener una mejor apreciación de la música que estamos tocando; nos interesa que los niños se acerquen a la música de una manera accesible y así se emocionen para buscar más posibilidades de adentrarse en el repertorio sinfónico”, puntualizó Carrasco.
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