Querétaro vibró con la música de los ídolos, de los clásicos; pero también de quienes caminan rumbo a la consolidación de sus carreras y, con ellos, el Festival Pulso GNP deja grandes expectativas para la edición del próximo año.

En 2018 Pulso nació con la presentación de bandas como Café Tacvba —con 30 años de carrera musical y que se ha convertido en   uno de los grupos de rock más importantes de América Latina—,  Zoé que también tiene camino propio, y con otros músicos de gran renombre en los países latinos.

Este año, Pulso GNP llegó más allá, también con bandas icónicas y un vistazo nostálgico al rock de los 90’s con la presencia de Rock En Tu Idioma, proyecto de Sabo Romo  que remembra una de las mejores épocas del rock en español, y Caifanes, otro de los grandes, de la mano de Saúl Hernández.

Caifanes no sólo llegó con los clásicos, sino acompañado de un nuevo sencillo denominado “Heridos”, tema que han descrito como una sanación ante un escenario de cruda violencia en la que está sumido México desde hace varios lustros.

Con un espacio que duplicó su capacidad, de organizadores que tomaron los “errores de novato” y los mejoraron en esta nueva edición, miles de rostros de jóvenes y jovencitas que se adentran a una cultura musical pocas vistas en Querétaro; otros miles de los “chavorrucos” que crecieron con “La Negra Tomasa” y con otras rolas tan representativas plasmadas en Rock En Tu Idioma, como “Bolero Falaz”,“ Paquita Disco”, “La Muralla Verde” o el “Son del Dolor”.

Los organizadores reportan que al menos 45 mil almas  vibraron con ese sabor único que la música en vivo genera; ni el sol, ni la polvareda que se levantaba con el taconeo, ni la falla en la señal celular lograron que decayera el ánimo; con 23 bandas al micrófono era imposible darle espacio al aburrimiento.

A la tercera llamada llegó otra de las bandas icónicas del rock en español, los argentinos de Los Auténticos Decadentes. “Besándote”, “Un Osito de Peluche de Taiwán”, “La Guitarra” y “Cómo me voy a olvidar”, fueron de las  más coreadas por el público queretano.

El broche de oro con Mi Banda El Mexicano, que con música totalmente diferente al “corte” del festival fue el representante del sonido popular mexicano.

Pulso GNP llegó para quedarse, el segundo año demostró mejor organización y la visión de cómo atraer a nuevas generaciones para ahondarse en la música considerada clásica, y de cómo impulsar a las nuevas bandas a que se queden en el gusto de quienes ya tienen un argot consolidado.

El 2020 promete para mucho más, y todo indica que vendrán mejores sorpresas porque después del cartel que mostrado —que incluyó bandas internacionales— sólo se puede ir hacia arriba e integrarlo como uno de los mejores festivales no solamente de México.

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