A pesar de las noticias sobre la crisis en Venezuela por la falta de medicamentos y comida, el actor Rodrigo Vidal partirá el próximo 6 de agosto a esa nación a grabar un programa de bloopers.

En entrevista con EL UNIVERSAL luego de un descanso de la telenovela Sueño de amor que ya está en la recta final de sus grabaciones, el actor comentó no temer ir a trabajar a ese país sudamericano.

Señaló que la productora que lo lleva esta consiente de esa situación y que, en todo caso, toda la producción “va bien cuidada”.

“Yo he estado mucho tiempo fuera de México y las noticias sobre nuestro país lo hacen ver como si fuera un campo de batalla, narcotráfico y secuestros. Entonces mucha gente piensa en no venir, pero yo digo que hay que ir para saber que está pasando en realidad. Porque luego te hacen muy mala publicidad y la gente no va”, subrayó.

Del programa que hará en Venezuela, Vidal mencionó que lo va a conducir, ya que se trata de proyectar en televisión los bloopers —errores— que ocurren detrás de los programas de televisión.

“Voy para allá el 6 de agosto y ya casi casi a grabar, son más de 20 emisiones, además luego de esta participación regreso a México para octubre cuando grabaré una película familiar con mi productora”.

Ante el cuestionamiento de lo que dicen de Venezuela que hay falta de medicamentos, Rodrigo comentó que si llegara a enfermarse estando allá, él tiene la ventaja de que tiene un pasaporte y tomaría un avión, por lo que esto no representa un obstáculo para este proyecto.

Al respecto de su trabajo actoral en Sueño de amor, indicó que nunca pensó hacer comparsa con Carmen Salinas, pero que resultó muy divertido y lo ha disfrutado mucho.

“Me agarran de vacilada todo el tiempo por los bigotes estilo Dalí. Todo mundo en la calle me hace referencia a esos bigotes, porque más allá de la actuación les llamó más la atención mis bigotes”.

En todas sus interpretaciones citó que le gusta hacer un verdadero trabajo de actor y de creación, además de que las hace lo más distanciado a Rodrigo Vidal.

“Gracias a Dios la gente entiende mis propuestas y me dicen: ‘qué padre que cambias, aunque es una minoría a las que les gusta mi trabajo, eso me hace muy feliz”, resaltó.

Señaló que siente nostalgia de que termina esta historia, “porque ya dejamos a los amigos y a los colegas. Tan sólo con Carmen tengo una amistad desde hace 25 años y no nos vemos seguido, entonces nos vamos a alejar un poquito, pero hicimos un trabajo divertido y original en esta producción de Juan Osorio, en donde se apostó por algo evidentemente mexicano y que se ha sacado adelante”, señaló el actor.

De los nuevos amigos que hizo citó a Christian de la Fuente, con quien al principio, comentó, tuvo varios roces, pero luego hubo gran camaradería y ahora se llevan muy bien.

Otras amistades que hizo fueron con Julio Manino y Osvaldo de León con quienes se lleva muy bien. “A mucha gente no la conocía y aunque mucha gente no lo valora, lo más importante en esta vida con las amistades, son un tesoro que hay que cuidar, porque siempre van a estar ahí”.

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