Acapulco.— Con canciones de rock, balada romántica y hasta un baile de tap, la cantante Alejandra Guzmán “convulsionó” a más de un fan la noche de su concierto en este puerto.

La llamada Reina de corazones no dio espacio para el aburrimiento durante su concierto realizado en el Forum de Mundo Imperial, el cual fue abarrotado por cuatro mil asistentes.

Guzmán aprovechó para hacer un llamado a la paz, primero para Latinoamérica y luego para el mundo .“Qué bonito es estar en Acapulco.

“Yo sé que esta noche es muy especial para mí y gracias por acompañarme, por tener el valor, la paz y la cordura de estar aquí esta noche y quiero pedir una cosa: quiero rock y paz esta noche”, dijo.

Expresó además que “México en especial es hermoso y además Acapulco es una de las ciudades del país que siempre he visitado desde mi infancia y lo seguiré haciendo”.

También hizo hincapié en que “hoy es un día de suerte”, aludiendo al título de uno de sus éxitos más recientes y que fue promovido como tema principal de una telenovela homónima: “Es un día de suerte porque tengo salud, estoy viva y además estoy enamorada”, dijo la cantante.

Esas palabras dieron pie para que Alejandra introdujera la canción titulada “Soy tuya”.

La velada del sábado, la Guzmán brindó por la que dijo era una “noche recargada de rock”. Y cumplió porque emocionó e hizo bailar desde sus butacas a sus fans con “La plaga”, “Reina de corazones”, entre otros de sus éxitos. En todos ellos mostró que su pasión por el rock y la balada pop, así como el baile los lleva en su sangre.

De su coreografía sobresalieron los efectos en tercera dimensión que se proyectaron en el escenario donde se podía ver una gran calavera que estaba montada sobre una estructura de metal. Justamente de ahí apareció La Guzmán y luego la utilizó para bailar en varias de sus canciones.

También aparecieron grandes globos de color rojo que fueron lanzados al público para que jugara un rato con ellos, pero que principalmente fueron los pequeños los que los disfrutaron más con los globos ya que se los llevaron a sus casas como un gran trofeo tras haber disfrutado del concierto de su artista favorita.

Tiempo de rock. Durante las dos horas y media que duró su recital, la gente siempre pedía más canciones, pero la cantante empezó a despedirse 15 minutos antes de las 23:00 horas.

Salió una vez para hacer el encore de rigor y nada más. Concluyó su espectáculo en punto de las 23:00 horas y la rockera ya no regresó a escena a pesar de los gritos y las peticiones.

Durante su presentación algunos fans lograron introducir una botella de vino que en varias ocasiones —al compás de las letras de la cantante— la levantaban para brindar.

Parecía que le dedicaban sus tragos a la cantante porque en lugar de aplaudir, se servían más vino y luego alzaban los vasos.

En general, la gente estuvo animada, bailando y coreando los temas de la Guzmán; fueran los temas románticos o los de rock, que son los favoritos tanto de ella como se su público. Como sea, los asistentes no pararon de cantar y bailar sus canciones y aplaudirle sus múltiples bailes o los solos de batería que interpretó su músico.

A pesar de que al final de su concierto algunos fans deseaban tomarse algunas fotografías con ella —y la prensa esperaba que saliera a dar alguna declaración—, la camioneta que transportaba a la artista no se detuvo.

Sin embargo, se sabe que Alejandra Guzmán está contenta de que, luego de que se escuchara a diario en la televisión su tema “Y de pronto un día de suerte”, ahora la misma empresa Televisa ya le pidió otra balada romántica para incluirla como el tema de entrada de otra telenovela.

Eso tiene feliz a la cantante porque de nueva cuenta se escuchará a diario por el Canal de las Estrellas.

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