Este recinto es un proyecto familiar en donde siempre te recibirán con una sonrisa en el rostro, y luego de un breve vistazo, podrás notar que su menú sale de lo común, ya que ofrece ingredientes como ate, salsa de queso crema y Jamaica.

La historia de “Fankujen” nació cuando Shery Pérez y su hermano Paco, en conjunto con su gran amigo Óscar —los dos últimos, chefs de profesión— buscaron crear un concepto culinario innovador, y en noviembre de 2016 se reunieron para platicar y coincidieron en crear un restaurante especializado en crepas estilo alemán.

“Se pronuncia ‘fankujen’, que quiere decir crepas en alemán, le dejamos así para que sea más fácil leer y pronunciar para la gente. En mi familia este platillo es tradición, ya que el papá de mi abuelita es alemán y la receta ha pasado de generación en generación”, relató Shery.

Las ideas comenzaron a fluir y por varios meses los dos chefs experimentaron para crear el menú, y propusieron combinaciones especiales, todo debía ser preparado en la cocina del lugar con ingredientes, en su mayoría locales.

Destaca su gran variedad de salsas para bañar las crepas, tanto dulces como saladas. Puedes elegir cajeta, jamaica, ate, queso crema, chocolate y frutos rojos, entre muchas otras.

En abril de este año abrieron sus puertas al público, con una decoración inspirada en los hogares de las abuelitas, las mesas y los manteles estilo vintage fueron donados por Shery Espinoza, mamá de los Pérez.

Los demás elementos también fueron hechos por ellos mismos. “Realmente arrancamos con poco presupuesto, los muebles los armamos nosotros, los lijamos y pintamos, creo que eso hace que se sienta más acogedor. El primer día vendimos una crepa y fuimos felices”, comentó Shery entre risas.

La forma de preparación de las “Fankujen” es más compleja que la de una crepa tradicional, su sabor es más suave, e incluso la manera de decorarlas es diferente, pero por supuesto, no revelaremos la receta.

Al poco tiempo de su apertura, “Fankujen” incorporó los paninis, que son preparados con pan de arándano y espinaca, provenientes de un local aledaño, las opciones de rellenos son las mismas que las crepas pero con distintos toppings como germen, salsa de chile serrano y cebolla, entre otras opciones.

El objetivo de este trío emprendedor es lograr abrir tres sucursales más en los próximos años, siempre teniendo detrás a la cocina a Óscar y Paco para mantener el sabor original de la familia.

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