Teodora Huesca Hernández es una apasionada del amaranto, que además de apoyar a pequeños productores de este tradicional quelite mexicano, ha dedicado los últimos 10 años de su vida a hacer pruebas para elaborar tamales, panes, tostadas y dulces de diversa índole para promover una alimentación saludable y deliciosa.

El amaranto, que se compra en semilla y se tuesta en comal, se combina con una infinidad de semillas como pepita, ajonjolí, chocolate, café y se adereza con miel de abeja y piloncillo, dando como resultado un producto de calidad increíble.

Teodora comenta “lo primero es nutrir a nuestra gente porque los niños comen todo de mala calidad y el amaranto es una gran fuente de proteína y nutrición para todos”. Con la harina de amaranto que ella elabora y, que por cierto, tiene un costo de 50 pesos el kilo, prepara suculentos y suaves tamales de piloncillo, de verdolagas en adobo, quelites con pipián y frijoles con mole, que se pueden encontrar en Conalteo, una empresa con sello muy femenino.

También elabora tamales de dulce con fresa, piña, manzana, zanahoria y betabel, entre otros. Un esfuerzo familiar que ha dado como resultado un producto de alta calidad que se puede conseguir en la colonia El Alto en el municipio de Santa Ana Chiautempan y hacer pedido al correo conyth12@hotmaill.com

Google News