Cuando existe una relación de más confianza entre las parejas, la lencería resulta una de las principales opciones como regalo para el 14 de febrero, pero más que buscar algo erótico para sorprender a la pareja en esa fecha especial, lo que se aconseja es portar prendas a la medida, que hagan sentir cómoda, guapa y femenina a la persona, sugiere Mary Salinas, asistente de mostrador de una reconocida boutique ubicada en el primer cuadro de la ciudad.
Como vendedora de lencería, Mary la considera una sexy opción para obsequiar en el Día de San Valentín “porque es una forma de darte gusto a ti misma y darle gusto a tu pareja, resulta algo más íntimo, más personal”, refiere.
Reconoce que en vísperas del 14 de febrero, la afluencia de clientes siempre es mayor, entre los que figuran también los hombres, quienes buscan el regalo para su pareja a pesar de las dudas.
“Las principales clientas son mujeres, aunque los hombres, en menor cantidad, sí llegan a comprar a propósito de estas fechas y entre sus dudas más frecuentes al momento de adquirir una prenda están las tallas y los colores”.
El color de la pasión
Y hablando del color, el más solicitado en lencería es el rojo con motivo a esta fecha, además del blanco y negro, así como tonos básicos.
En cuanto a los diseños, se oferta una gran variedad para todos los gustos, necesidades y bolsillos, como “la tanga, el cachetero, la pantaleta, el bikini; existe una infinidad de modelos, texturas, colores y estampados como el animal print que está muy de moda”, comenta Mary.
Sin embargo, la tanga es la más vendida con motivo del Día del Amor y la Amistad, “es una prenda que está usando mucho la mujer actual, y sin duda el color preferido es el rojo, continúa.
Además de estas piezas, “los disfraces de diablito, de policía y de colegiala, y los babydoll un poco más sugestivos, sí se les puede llamar así, como los de red por ejemplo, que son un poco más sexys, también son bien vendidos”, reitera.
La combinación
Muchas se cree que la mujer que usa el conjunto en lencería va preparada para el sexo, pero lo cierto es que la combinación en la ropa interior es muy importante como parte del buen vestir, ya sea en los mismos tonos o dentro de la gama de colores de una pieza con otra.
“A la mayoría de las clientas sí les gusta usar combinaciones, son muy pocas las que se llevan prendas de diferente color y es que para armar un conjunto no precisamente tiene que ser algo plano o igual, se puede escoger por ejemplo un brassiere en rosa y combinarlo con una tanga en rosa con blanco u otro tono que esté dentro de la gama”, sugiere Mary.
Como asistente de mostrador, Salinas asegura que se ha llevado varias sorpresas, “nunca me hubiera imaginado por ejemplo que un babydoll de red lo compraran las mujeres mayores y de hecho son las que se inhiben menos, se llevan estos diseños sin mayor complicación”, revela.
Otras de las prendas que se pueden encontrar en la boutique que atiende Mary Salinas son los trajes de baño, quien envía un mensaje a las mujeres a través de este medio y les dice “que se atrevan a ser sexys para ellas mismas”.
