Bebidas como la piña colada o las medias de seda son, sin lugar a dudas, irresitibles en el mundo de la coctelería. Sin embargo, es importante innovar y crear nuevas especialidades para ampliar las opciones, pues las creaciones pueden ser desde mezcal y tequila, hasta whisky, vodka o ginebra. A éstas se pueden agregar licores, jarabes, jugos y frutas de temporada, como frutos rojos, guayaba y lichi.
De acuerdo con Alejandro Mora, jefe de barra del restaurante George, las mujeres deben comenzar con algo con toques clásicos sin que sean las mismas bebidas de siempre.
“Tenemos el Sweet Lucy que tiene un corte clásico, pero orgánico porque aquí hacemos el jarabe de rosas, además tiene ginebra y lichi que son materias primas muy femeninas, están muy de onda entre las chicas las rosas y el lichi”.
Otra opción son los cocteles frescos, pues estamos en temporada de calor “por eso tenemos uno con kiwi, que es más tropical. Aunque también se pueden hacer combinaciones sencillas con frambuesas, zarzamoras y fresas, sólo hay que tener un poco de imaginación y no temer a experiementar, éstos son como para tomarlos en una terraza, cuando hace calor”, explica Uriel Jiménez, bartender.
Con toques mexicanos
Ambos mixólogos coinciden en que lo ideal es comenzar con sabores sencillos e ir subiendo la intensidad; por ejemplo, en el caso del mezcal hay quienes no pueden tomarlo solo porque les parece muy fuerte.
“La idea es que no todo sea mezcal con sal de gusano y ya, sino que tengan una manera de probarlo y disfrutarlo, en coctel les cuesta menos trabajo.
“También utilizamos elementos mexicanos, como la miel de agave, la sábila y diferentes frutas, pensamos en nuestras raíces y lo que tenemos acá. Queremos que haya opciones para todos los gustos, por ejemplo para los hombres o para mujeres que quieren algo más fuerte está un coctel de mezcal al que le agregamos pimiento”, puntualiza.
De manera que la recomendación de los expertos es que todos prueben bebidas nuevas y se enamoren de otros sabores. No tiene que ser una fecha especial, pero si hay que hacer honor a quienes comparten su conocimiento en el salón de clases y son apasionados de la enseñanza, entonces la mixología es la opción.
