La afamada Colección FEMSA, la más importante de arte contemporáneo y moderno latinoamericano, está de visita en el Museo de Arte de Querétaro (MAQRO) con “Una mirada al arte contemporáneo”, exposición que permanecerá abierta al público hasta el 31 de julio.
Colección FEMSA —a través del patrocinio de cadena OXXO y la colaboración de Coca-Cola FEMSA— está promoviendo “Una mirada al arte contemporáneo”, integrada por 37 piezas de distintos formatos, materiales, texturas y propuestas. Obras de 30 artistas de varios países, pero todos con una constante: han hecho su obra en México o a partir de la mexicanidad.
Rafael Rodríguez representa a Querétaro en este universo latinoamericano de arte actual en el Museo de Arte. Es el único artista local con obra en la colección y está presente con un retrato hiperrealista de gran tamaño, titulado Retrato 19 “Ivonne”.
La exposición que se pensó y diseñó para el Museo de Arte de Querétaro “De aquí se regresa a Monterrey y descansa”, informó Rosamaría Rodríguez Garza, gerente del Programa Cultural FEMSA.
El brazo cultural de FEMSA organiza unas 10 exposiciones al año. “No es una colección que esté embodegada, es una colección viva, entonces tratamos de que las obra viajen”, indicó la especialista.
Son aproximadamente 1, 250 obras las que integran la reconocida Colección, producto de la Bienal FEMSA, que da cobijo y sustento a jóvenes autores y maestros consagrados de 20 países de América Latina.
El proyecto nació en 1977, con una obra del Dr. Atl, muralista de extremos anímicos y pictóricos; fue una pieza donada por doña Rosario Garza Sada de Sambrano.
A la fecha atesoran obra de Frida Kahlo, de los primeros cubistas, el surrealismo, de la Escuela Mexicana de Pintura, de los muralistas pero con obra de caballete, de la ruptura, El mexicanismo, y más. “No están todas las corrientes, pero para allá vamos, esa es la intención”, dijo Rodríguez Garza.
El arte contemporáneo siempre te provoca algo, “siempre”, asegura Magaly Hernández López, coordinadora de investigación de la Colección FEMSA.
“Lo que me agrada del arte contemporáneo es que apela a la capacidad de asombro de la gente; no te deja sin nada; te toca, te llega, pero de una forma no bonita”, agregó.
El arte contemporáneo “nos refleja y llega a ser incómodo para la sociedad”, explicó la investigadora.
Porque es “gracias al arte es que podemos reconocernos y saber de los que estuvieron antes que nosotros”, citó la especialista.
