El vicario de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril, urgió a promover el diálogo tanto en los hogares como con las autoridades. Con el gobierno, servirá para solventar el problema en el transporte y, en las familias, para combatir la creciente inseguridad que existe en el país.

Dijo tener confianza en que se llegará a un acuerdo entre la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) y las autoridades correspondientes en el tema de la tarifa y servicio del transporte público, pues a ambas partes la interesa lo mejor para la sociedad, de ahí que únicamente les falta analizar la forma de lograrlo.

Lo anterior lo declaró al ser entrevistado respecto a los señalamientos desde el consejo universitario de la UAQ, dónde la rectora, Teresa García Gasca, lamentó desinterés por parte de las autoridades estatales para escuchar los reclamos estudiantiles en materia de transporte, así como la necesidad que existe de revertir el incremento de 60 % en el costo de la tarifa preferencial.

Será, valoró, la disposición al diálogo lo que llevará a un acuerdo, así como a mejorar el servicio.

Lara Becerril resaltó que las autoridades deben mantener disposición para llegar a acuerdos en todas las grandes inquietudes sociales, pues el diálogo es el vehículo del buen gobierno.

“Esperamos cosas muy buenas para Querétaro, en especial para la zona urbana, que es donde el debate ha estado en tema”.

Respecto a la seguridad, lamentó que la violencia se fortalece en todo el país.

Varios mexicanos migran a Querétaro, pues aquí no observan una violencia tan exacerbada, aunque sí se registran delitos.

Entre los delitos que principalmente observan los queretanos se encuentran los robos, entre ellos, los que se cometen a casa habitación y en la calle, aunque también se han registrado asesinatos.

La violencia ocurre cuando se descompone la raíz de la sociedad, es decir, la familia.

“Trabajar a favor de la familia es una urgencia, si solucionamos el problema de la familia, estaremos solucionando el problema de la violencia a nivel social”.

La violencia es multifactorial, con problemas como: pobreza, crecer en un ambiente familiar violento y encontrar en los delitos un modo fácil de vivir.

Es importante castigar la violencia, pero más importante resulta prevenir, al lograr contar con familias sanas.

Resaltó que los padres deben involucrarse en generar una buena educación para sus hijos, pues solo así todos saldremos ganando y estimó que las madres, particularmente, tienen un papel fundamental.

“Urge intensificar más ese trabajo, para tener una sociedad sana, desde las células sociales, y la célula social es la familia”, remarcó Martín Lara Becerril.

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