En Querétaro sí se aplica el Operativo Mochila, siempre que exista la anuencia de los padres y madres de familia, informó el secretario de Educación, Alfredo Botello Montes.
El funcionario explicó que la medida es un acuerdo del comité de padres de familia de cada institución, y se aplica en coordinación con el área directiva, por lo que no es una acción generalizada o en la que incidan las autoridades del gobierno estatal.
“Se realiza en coordinación con los propios padres de familia, la principal operación mochila debe estar en los hogares y también estar trabajando mucho en la formación de valores (…) cada institución determina este tipo de acciones, cada una ve algunas formas o medidas que se tengan”, dijo Botello Monte.
La aplicación de esta medida generó desacuerdos en años anteriores en el estado por violentar el derecho de niños y niñas que acudían a clases.
De acuerdo con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), el operativo violenta los derechos a la educación, a la intimidad y a la participación de las y los estudiantes.
Recientemente, la CNDH estableció para la Ciudad de México —por el operativo Mochila Segura— que también se falta al principio del interés superior de la niñez y los criminaliza, pues presupone que el alumnado puede cometer algún delito.
La comisión también especificó que la garantía de seguridad y protección corresponde a los adultos, un precepto que está marcado en la Ley General de Educación, al indicar que las autoridades deben “adoptar medidas de protección y de cuidado que aseguren la preservación de la integridad física, sicológica y social de los educandos sobre la base del respeto a su dignidad”.
El secretario hizo énfasis en que la revisión de las mochilas corresponde a los padres de familia, es decir, son ellos quienes deben garantizar que sus hijos e hijas no introducirán algún objeto que represente un peligro para los estudiantes y profesores.
Afirmó que hasta el momento no han tenido reportes del hallazgo de algún objeto o sustancia prohibida.
