Los municipios de Amealco y Jalpan de Serra son las zonas donde se concentran los operativos para evitar la tala clandestina. Sin embargo, no hay focos rojos ni ecocidios en Querétaro, informó José Luis Peña Ríos, delegado de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Mencionó que han recibido 100 denuncias ciudadanas en lo que va del año, 30% referentes a tala ilegal, aunque se trata de individuos y no de grupos los que realizan esa acción, el resto se relacionan con otras acciones contaminantes del medio ambiente.
“Estamos trabajando con las autoridades estatales y municipales; hemos tenido todo el apoyo (…), no hemos tenido gran incidencia, afortunadamente; no podemos hablar de hectáreas, hablamos de individuos, afortunadamente no es un problema”.
A nivel nacional, la Profepa contabiliza más de 100 áreas críticas por la práctica ilegal, y aplica el Programa de Combate a la Tala Clandestina, que implica recorridos e inspecciones en predios, centros de almacenamiento y transformación de materias primas forestales y zonas boscosas.
En cinco años, de 2013 a 2018, se realizaron 21 mil 138 inspecciones, 10 mil 900 recorridos de vigilancia y mil 477 operativos en materia forestal, agregó el funcionario. De las 8 mil 739 visitas de inspección a predios, con y sin autorización de aprovechamiento forestal, se impuso suspensión total a 523 predios.
De esa forma se aseguraron 174 mil 14 metros cúbicos de madera, mil 857 vehículos, 2 mil 984 toneladas de carbón vegetal, 3 mil 718 herramientas y equipos, y se clausuraron 582 aserraderos y se ha puesto a disposición del Ministerio Público federal a 411 personas. En estos números no figuran grandes operativos en Querétaro.
Cuidado de vida silvestre.
El funcionario federal destacó que, en coordinación con otras dependencias, y gracias a las denuncias ciudadanas, han detectado a personas en posesión de vida silvestre: “Logramos que dos fueran vinculadas, que hicieran reparación del daño y estén haciendo trabajo comunitario en el Parque Nacional El Cimatario; tenían tucanes y loros cabeza amarilla, uno en Corregidora y otro en la capital”.
Además han aplicado sanciones a desarrollos inmobiliarios debido a la violación de normas relacionadas con la deforestación del suelo.
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