Aumentar el muestreo y retomar el “entrenamiento social” son clave para contener la enfermedad, señaló la Vocería Organizacional del gobierno del estado.
Insistió en los cinco pasos de lo que se denomina el “entrenamiento social” como alternativa fundamental para aprender a vivir con el virus entre nosotros sin contagiarnos, en tanto surge una vacuna o tratamiento médico para contrarrestar la enfermedad.
El vocero organizacional, Rafael López González, manifestó que el mayor interés de la vocería es informar a la sociedad para que todos sepan exactamente en qué punto del camino están las y los queretanos.
“Que conozcas la ruta, que entiendas toda la estrategia, para que sepas lo que ya pasó, lo que está pasando y lo que va a pasar”, abundó el representante.
Respecto de la estrategia estatal que está en marcha para detectar un mayor número de casos positivos y así evitar que la enfermedad continúe expandiéndose, explicó que al dar paso a un mayor muestreo será normal que se registren más casos positivos y activos.
Ello, agregó, lejos de alarmarnos como sociedad, debe generar certeza, pues al rastrear y detectar a tiempo más casos positivos, tendremos la seguridad de estar cortando oportunamente la cadena de contagio.
La estrategia estatal de pruebas, rastreo y aislamiento, a la par del entrenamiento social, representa una medida efectiva para contener la enfermedad, aseguró.
Por ello, llamó a retomar los cinco pasos del entrenamiento social, que son: identificar riesgos, diseñar una estrategia, cambiar hábitos y modificar espacios, ensayar antes de salir y, por último, estar al tanto de las instrucciones diarias de las autoridades y seguirlas.
Además, insistió en que hoy la mejor vacuna es usar el cubrebocas, mantener la sana distancia y lavar continuamente las manos.
“Estamos frente a un fenómeno natural implacable; no podemos negociar con él, ni tampoco saber cuándo terminará”, afirmó.
Lopez González afirmó que el mejor consejo es cuidar la salud integral, “cuida tu vida”.
Reiteró el llamado a usar el cubrebocas y ser capaces de decir no a fiestas y reuniones con amigos o familiares durante octubre y noviembre, a fin de que podamos frenar la probabilidad de contagio, y así, probablemente, poder pasar la Navidad con nuestros seres queridos.
“La decisión está en tus manos; vive tu libertad con responsabilidad”, concluyó.
