Concesionarios del transporte público metropolitano Qrobús denunciaron presiones de directivos de la empresa ADO para que salgan de la empresa concesionaria, además acusaron al director del Instituto Queretano del Transporte (IQT), Alejandro López Franco, de promover la venta de concesiones.
Los socios de las empresas Sangremal y Nueva Generación ofrecieron una rueda de prensa en la que informaron la retención de ganancias derivadas del servicio de transporte, y que se concentra en la empresa Móvil Qrobús, además que les han exigido dinero para seguir invirtiendo en la modernización.
Ante ello, el IQT -mediante un comunicado de prensa- reportó que “siempre han estado abiertos al diálogo y seguiremos, conforme a nuestras facultades, responsabilidades y compromiso, ayudándoles a buscar la mejor alternativa para que salgan delante”.
Aclararon que el IQT y su titular, Alejandro López Franco, solo poseen información relacionada con la operación del servicio, que nada tiene que ver con una cuestión mercantil, y que la información sobre el valor de las acciones y la toma de decisiones de venta, son exclusivas de los socios de cada una de las empresas.
“Como autoridad, el IQT no tiene mayor participación en las decisiones al interior de cada empresa; sin embargo, cuando así se requirió por los propios socios de la concesionaria, se estableció contacto entre quienes habían manifestado interés por vender”.
Aseguraron que nunca ha existido mal manejo de la información, y reitera la exigencia por la evolución real del transporte público para que se traduzca en un mejor servicio requiere empresas comprometidas con el usuario y con las capacidades financieras, administrativas, técnicas y legales.
