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Aunque todo líquido hidrata en términos generales, no se recomienda el consumo de la cerveza como medio de hidratación en época de calor, ya que puede subir la temperatura corporal y causar problemas, asegura Abelardo Ávila, investigador del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ)
En esta temporada de calor existe un riesgo importante de sufrir deshidratación, porque uno transpira más, además de que son frecuentes las infecciones gastrointestinales. Ante este panorama, Ávila recomienda a la población consumir agua potable, cuidar la higiene con la que se preparan alimentos y evitar comer en la calle.
Resaltó que ingerir bebidas energetizantes o sueros con electrolitos no hacen la diferencia con respecto al agua potable y especificó que sólo en caso de que ya exista una infección gastrointestinal y se derive una deshidratación seria se aconseja su ingesta.
“Fisiológicamente no es necesario el consumo de bebidas energetizantes o los sueros preparados, hay que tomar agua limpia, cuidar la higiene en alimentos, usar ropa adecuada, y no insolarse. Tomar estos productos no es mejor que el agua, la diferencia es cuando tienen un uso terapéutico, cuando ya se estableció una deshidratación por infección gastrointestinal y donde ya, derivado del proceso diarreico no se retiene agua, sino que se secreta, entonces sí hay que usar sales de hidratación, pero para eso existe vida suero oral, que además es gratuito”.
El investigador del INCMNSZ señaló que estas soluciones hidroelectrolíticas pueden complicar una deshidratación y recargar el gasto cardíaco. “Se pueden usar en caso de que exista una enfermedad o que ya sea de manejo médico, pero para la rehidratación, la sed, que uno sude mucho, eso se calma con agua y alimentación normal. Hemos generado una industria muy poderosa de vender bebidas recurriendo al miedo y eso no causa ninguna ventaja”.
Abelardo Ávila, dijo que en esta época, los adultos mayores y los menores de cinco años caen muy fácilmente en desequilibrio electrolítico, por lo que hizo un llamado a la población para que esté al pendiente de sus familiares en esta etapa de sus vidas.
Agregó que se ha comprobado que el crecimiento de bacterias y hongos incrementa si los alimentos no están en refrigeración. “En días como hoy de 30 grados, en cuestión de 20 – 30 minutos, pueden proliferar bacterias en un alimento que esté contaminado. Por ello hay que ser cuidados en la higiene de los alimentos y no consumir los que son más propensos a la descomposición”.
A su vez, el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), aconsejó el consumo de agua simple potable y asegurarse de que los recipientes donde se almacena estén limpios, evitar comer en la calle y verificar en el hogar que los alimentos se conserven en refrigeración para que no se descompongan.
También se pide a la sociedad que se laven las manos, esta es una práctica económica, rápida y sencilla que evita enfermedades pues reduce el riesgo de infecciones gastrointestinales y respiratorias, la gente debe lavar sus manos después de ir al sanitario, luego de cambiar el pañal de un bebé, antes de comer y antes de preparar los alimentos.
En ésta época de estiaje pueden ocurrir golpes de calor, insolaciones y deshidratación, por ello, la Secretaría de Salud exhorta a los mexicanos a no esperar a estar sediento para beber agua, además de evitar la ingesta de líquidos con cafeína, azucarados o bebidas alcohólicas.
Es recomendable el uso de ropa ligera, de colores claros y usar sombrero o sombrilla para protegerse del sol, elegir las primeras horas del día para realizar actividades al aire libre y deportivas, y no permanecer en un vehículo estacionado o cerrado.
Para disminuir hasta 80 por ciento el calor en el interior de la casa se pueden cubrir las ventanas con la ayuda de persianas, cortinas o periódicos.
La Secretaría de Salud reitera que se debe evitar la automedicación y ante cualquier molestia acudir al médico.
