El secretario de Salud, Alfredo Gobera Farro, informó que la Unidad de Oncología que construye el estado de Querétaro registra avance de 60%. De acuerdo con el plan, en diciembre debe estar lista la infraestructura.

Una vez terminado el espacio físico, se dará paso a las pruebas de radiación que hará la Comisión Nacional de Seguridad Nacional y Salvaguarda para garantizar que no habrá filtraciones hacia el exterior.

El funcionario recordó que se requiere equipo altamente especializado para el tratamiento del cáncer, por lo que las paredes que recubren el espacio de terapia tienen un grosor de tres metros.

A partir de las pruebas se acondicionará la zona con el equipo que ya está comprado y se estima comenzar a operar en el primer trimestre del año.

“Llevamos un 60%, ya están los permisos, se valida a través de la comisión, una vez que arranca ellos hacen valoraciones permanentes, hay espacios en donde tenemos hasta tres metros de cemento con varita para evitar la filtración y contaminación”.

Una vez que se concluya la obra se harán las verificaciones y con la aprobación, comenzará la instalación de los equipos “tenemos proyectado que a finales del año estará terminada la obra y una vez terminada se harán las validaciones”, dijo.

Respecto del equipo médico, el secretario informó que están analizando el tema presupuestal y de capacidad de servicio para hacer las contrataciones, por ahora se desconoce cuántas personas se requieren.

En el proceso de construcción, cada semana se envían reportes sobre el avance de la obra por lo que se hacen pruebas periódicas para garantizar que no existen deficiencias.

En esta nueva unidad se dará atención a los pacientes con cáncer, a través de quimioterapias y radioterapias; además de tener unidades de diagnóstico. Cuando una persona requiera cirugía, será remitida a los hospitales.

La construcción y el equipo ya están licitados, la obra está en proceso y el equipo de última generación está por llegar al estado, únicamente a la espera de que esté listo el edificio.

La atención no sólo será para la población de Querétaro sino para los estados vecinos, además el IMSS ya solicitó que las instalaciones operen como un servicio subrogado.

La primera etapa lleva una inversión de 150 millones de pesos y se prevé, cuando esté operando el centro, pasar a una segunda etapa para crecer el servicio y que se convierta formalmente en un hospital.

El edificio está a un costado del Hospital de Especialidades del Niño y la Mujer y ya ha sido supervisado por autoridades federales.

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