Sofía Anaya, vocera de la Universidad del Valle de México (UVM), informó que el Campus Querétaro permanecerá cerrado un par de semanas, debido a que en seis de sus edificios se detectó, luego del sismo del pasado 19 de septiembre, que no fueron construidos para soportar temblores de gran magnitud.

Recordó que luego del sismo, todas las unidades académicas de la UVM realizaron dictámenes estructurales para corroborar que todos su edificios estuvieran en buenas condiciones.

“Así lo hicimos en la universidad y el perito nos entregó un examen preliminar, donde decía que nuestras instalaciones no habían sufrido daños a raíz del sismo. Sin embargo, este fin de semana nos entregó su dictamen definitivo y en él nos señalaba que algunas edificaciones, si bien no habían sufrido daños a raíz del sismo, no reúnen las condiciones de seguridad estructural que se requieren para soportar un sismo de mayor magnitud”, indicó.

Esta situación, comentó, preocupó mucho a las autoridades de la UVM, por lo que sabiendo de esta información, en un acto de responsabilidad, decidieron suspender las clases, para realizar dictámenes adicionales y con base en esa información, tomar decisiones respecto a cuáles instalaciones están en condiciones de albergar a los alumnos con seguridad, y cuáles necesitarán ser reforzadas.

Por ello agregó, les pidieron 15 días a la comunidad estudiantil, en lo que llevaban a cabo la evaluación profunda de las instalaciones.

Agregó que los edificios de la UVM tienen alrededor de 25 años, por lo que no son construcciones muy antiguas, siendo seis los que presentan dudas en su seguridad estructural.

“En realidad el perito al revisarlos encontró que no fueron construidos con la técnica que se requiere para aguantar sismos de gran magnitud. Eso es lo que ocurre con las construcciones en Querétaro, como usualmente aquí no ocurren temblores, las especificaciones no son tan rigurosas, pero dado que ahora los fenómenos naturales están azotando a todas las regiones del país, más vale asegurarse”.

Agregó que antes de determinar si se procederá legalmente en contra de quien construyó los edificios, la prioridad es, luego de pedir a otros peritos su opinión, que les indiquen que es lo que procede con estos edificios para que puedan operar con seguridad. “Mientras no tengamos esa información no vamos a poder utilizar esos edificios”, añadió.

El Campus Querétaro de la UVM tiene una matrícula de seis mil estudiantes, aunque muchos de los mismos regresarán a clases en próximos días

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