De la mano del empresario Alberto J. Echazarreta, la Orquesta Filarmónica del Estado de Querétaro (OFEQ) iniciará una nueva etapa, que incluye cambios como sustituir la figura de director titular por un director artístico; y evitar problemas administrativos auditando las operaciones de la orquesta y supervisando sus acciones con el apoyo de gobierno y músicos.

En conferencia de prensa, Echazarreta se presentó como presidente del Consejo de Administración de la OFEQ y explicó la situación actual de la agrupación, además detalló el plan que tiene para la nueva etapa del grupo.

El déficit en el que se encuentra la orquesta, comentó Echazarreta, se originó por la contratación de directores huéspedes y músicos solistas invitados, que representaron un gasto extra para los conciertos; además de crear eventos con “expectativas falsas”, como el de El TRI, que primero se programó para el Estadio Corregidora y al final se hizo en el Estadio Municipal, ese cambio afectó la taquilla y sólo ingresaron 700 mil pesos.

Echazarreta dijo que las grabaciones de discos también generaron altos gastos. Hoy en día tienen en bodega 16 mil piezas que no se han vendido y que representa dinero congelado.

Además hay una deuda con la renta del inmueble de las oficinas la OFEQ, por lo que están buscando un nuevo sitio para reubicarse.

Dijo que se reducirá el déficit eliminando el puesto de asistente de director, doctora y los dobles puestos que tenían algunos empleados, además de los bonos “a discreción” que se otorgaban a músicos o personal administrativos. El sueldo de los músicos se respetará, acotó.

El director titular de la Orquesta Filarmónica del Estado de Querétaro, José Guadalupe Flores, estaba ganando mensualmente 107 mil pesos. Este mismo mes se finiquitará la relación de Flores con la OFEQ. Y el sueldo de un director artístico será de 50 mil pesos, precisó el empresario Echazarreta.

Detalló que en un concierto, la orquesta genera un gasto de 700 mil pesos y el objetivo es lograr 30 mil pesos de ingreso en taquilla, y en los últimos tres se han recaudado de 25 a 29 mil pesos.

“El barco se hunde”. A principios de 2017 se designó a la Secretaría de Cultura de Querétaro como la encargada de entregar el apoyo económico de gobierno a la OFEQ. La relación de los músicos con el director titular, José Guadalupe Flores, ya estaba desgastada de años atrás, pero causó ruido la presencia de un “emisario” del área de Cultura que les dijo a los músicos : “Señores, el barco se está hundiendo, aquí está el bote salvavidas, se quedan o se van.

“El señor no estaba suficientemente informado de la situación, ni siquiera sabe cómo funciona una Orquesta, no voy a dar el nombre, pero él dijo: ‘El compromiso de la Orquesta Filarmónica es dar 100 conciertos por año’, para el momento llevamos tres (...) quedan 97 concierto, divididos en 10 meses”, reveló el representante de los músicos de la Filarmónica.

La propuesta, imposible de realizarse, dijo, llevó a los integrantes de la agrupación a buscar ayuda de Echazarreta, quien forma parte de los inicios de la historia de la OFEQ. A raíz de los cambios de Secretaría de Educación a Cultura, comenzaron a resaltar los problemas en lo administrativo.

De los ocho y medio millones de pesos que se adeudan al SAT, comentó Echazarreta, la “orquesta no tiene capacidad para pagar esa deuda”. Su principal objetivo es llegar a fin de año sin déficit.

“Se trabajará con un presupuesto revisado, estamos partiendo de los 24.7 millones que nos está dando el gobierno, pero hemos ajustado el presupuesto a 24.5 millones de pesos, esto nos debe dar un resultado superavitario, el compromiso que yo asumí con Paulina [Aguado Romero] fue que ella nos dio todo su apoyo y la libertad de reorganizar la orquesta y yo en lo personal me comprometí a final del año a que la orquesta va a ser superavitaria”, explicó presidente del Consejo de Administración de la OFEQ.

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