El Centro Histórico tiene un elevado comportamiento comercial, sin embargo, la prioridad es conservarlo como habitacional. Querétaro ocupa los primeros lugares de las 10 Ciudades Patrimonio más habitadas en la zona de monumentos.
El delegado del Centro Histórico, José Niembro Calzada, destacó a la zona por la riqueza cultural e histórica, aunado a que es declarado Patrimonio Mundial por la Unesco debido a su arquitectura barroca y neoclásica en inmuebles.
“Hay una lucha constante en tratar de preservar la cuestión habitacional contra la comercial. Una casona antigua del Centro Histórico donde antes vivían familias de 30 personas, hoy viven los abuelos y la abuela, y los hijos cuando reciben la herencia no le ven otro fin que un hotel o restaurante o plaza comercial”, lamentó Niembro.
Son 140 mil habitantes en la delegación Centro Histórico, pero específicamente para la zona monumental no hay registro definido, actualmente se trabaja en un censo delimitado con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
El delegado reconoció el incremento económico que implica vivir en la zona desde la adquisición de una casa. El metro cuadrado de terreno se vende desde los seis, ocho y hasta 10 mil pesos, dependiendo la ubicación, las calles más costosas son 5 de Mayo y Corregidora, en comparación a las más económicas como Reforma y Doctor Lucio.
Sin embargo, esto se compensa con los beneficios que tienen los habitantes de la zona de monumentos para el pago de impuestos. Niembro Calzada dio detalle sobre los programas especiales para descuento en el pago predial.
“Hay una falta de información en la gente que vivimos en el Centro, deberíamos de sacarle más provecho a una cuestión del orden del predial, que si uno acredita mantenimiento, cuidado y conservación te lo reducen en una cantidad importante”, comentó.
El trámite toma un día acudiendo a la delegación o al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para la obtención de información para ser acreedores a un descuento de pago predial de 30%.
Algunos de los lineamientos son: comprobar la conservación del predio, de acuerdo al catálogo de monumentos, y haber dado mantenimiento a la infraestructura.
Niembro dijo que pese a estas opciones para apoyo a la economía y compensar las limitaciones por vivir en la zona monumental, son escasos los ciudadanos que lo solicitan.
El descuido de las casas antiguas en esta zona pone en riesgo la seguridad de los queretanos. Son alrededor de 14 casonas, en su mayoría habitadas, que están en estado crítico por derrumbarse, han intervenido tres con aprobación del INAH, pero hay 70 más en mal estado.
La negación a desalojarlas se debe a complicaciones legales, con ello Protección Civil no puede intervenir sin consentimiento del dueño.
