Actualmente la delegación queretana de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) recibe cerca de 300 denuncias al mes, lo que representa un aumento de 100% comparado con el primer trimestre del año, cuando promediaban cerca de 150, informó la dependencia.

Este incremento de la denuncia ciudadana ha permitido que se detecten diversas irregularidades cometidas por prestadores de servicios o productos, lo que este fin de semana arrojó, entre otros, la clausura de una cafetería en el Aeropuerto Internacional de Querétaro (AIQ) por no exhibir en la carta el precio de sus productos.

De acuerdo con información vertida por la Profeco, los comercios sancionados se ubican en la calle Luis Vega y Monroy, colonia Balaustradas; en Plaza Candiles; en el cruce de Boulevard Bernardo Quintana y Pie de la Cuesta, y en la esquina de Milenio III, además de un restaurante ubicado en el Aeropuerto Intercontinental de Querétaro (AIQ).

En ese sentido, el titular de la Profeco en Querétaro, Alfredo Lugo Oñate, explicó que la verificación consistió en revisar las etiquetas de los productos que estaban al alcance de los consumidores, los cuales, en varios casos, revelaron que las fechas de caducidad ya se habían concretado, lo que representaba un riesgo para los compradores.

Suspensión a comercio del AIQ

Tras una verificación que se implementó en el Aeropuerto Intercontinental de Querétaro se colocó un sello de “suspensión de la prestación de la comercialización de bienes, productos y servicios”, debido a que en una cafetería del lugar no se exhibían los costos de sus productos.

De acuerdo con la dependencia, los sellos podrían ser retirados a la brevedad, después de que los representantes de las empresas imputadas pongan al corriente los requisitos necesarios para este procedimiento, que se prevé continúe de manera aislada y sorpresiva en los diferentes establecimientos del estado.

“Está muy bien que hagan este tipo de operativos, lamentablemente uno como consumidor la mayoría de las veces no tiene la precaución de verificar lo que está llevándose a casa y luego nos confiamos y comemos cosas que, como en este caso, ya están echadas a perder. Pero deberían hacerlo más seguidos o de manera permanente”, indicó Viviana Reséndiz, clienta de un supermercado.

Aunque las denuncias contra centros comerciales en la Profeco han ido en aumento, son los sectores inmobiliarios y de comunicación los que más expedientes acumulan en el ente encargado de la procuración de justicia para el consumidor.

Google News

TEMAS RELACIONADOS