El estrés, problemas escolares, laborales y familiares, son las principales causas del insomnio, padecimiento que afecta a 30% de los queretanos, informó el director de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Querétaro, Héctor Castillo Perrusquía.

Éste es un trastorno del sueño que hace referencia a la incapacidad para dormir; se entiende por la dificultad para conciliar el sueño, despertar constantemente durante la noche o despertar antes de que se cumpla el descanso.

El médico del IMSS apuntó que por lo menos la mitad de la población en alguna etapa de su vida ha sufrido insomnio, pues el trastorno afecta a 30% de la población adulta.

“Es más frecuente en mujeres, ancianos, personas de un nivel socioeconómico alto y en los que padecen una enfermedad siquiátrica”, informó el especialista.

De acuerdo con el médico, el organismo humano requiere entre seis, ocho y hasta diez horas de sueño (dependiendo la edad) para lograr un descanso físico.

Un recién nacido necesita de 16 a 18 horas de sueño; los adolescentes necesitan nueve horas de descanso y los adultos de siete a ocho.

Entre las consecuencias de sufrir insomnio destacan: la ansiedad, problemas en las relaciones interpersonales, reducción en la productividad, sensación de cansancio constante y la pérdida de la libido —deseo sexual— en una persona.

Héctor Castillo señaló que existen dos tipos de insomnio: el agudo ocasionado por alguna preocupación, y el crónico que se provoca por padecimientos sicofisiológicos.

La importancia de conciliar el sueño, detalló, es que durante este proceso biológico se lleva a cabo la producción de hormonas que hacen posible la recuperación física de las personas.

“Es importante que se identifiquen tres etapas del sueño, la primera es la vigilia —el estado de alerta—, la segunda son los movimientos oculares rápidos —en los que se da el proceso hormonal— y, por último, en donde se descansa”, señaló el doctor Castillo Perrusquía.

Testimonio de población

En un sondeo realizado por El UNIVERSAL Querétaro, a cinco personas, tres de ellas informaron dormir un promedio de cinco horas. Entre sus preocupaciones destacan la propia enfermedad y problemas económicos; en contraste con dos personas, quienes externaron descansar hasta seis horas.

Jorge Alberto Reyes Antele, habitante de la ciudad de Querétaro, aseguró conciliar el sueño durante cinco horas; sin embargo, durante este periodo suele despertarse durante la noche.

“La ansiedad me obliga a levantarme a altas horas de la madrugada para salir a caminar a la calle o realizar ejercicio. Posteriormente vuelvo a la cama y duermo por periodos cortos, hasta el amanecer”, dijo.

El IMSS recomienda a las personas que sufren de este tipo de trastornoque retiren el televisor en su dormitorio, que determinen un horario para dormir, que la habitación tenga un clima adecuado; además de usar ropa cómoda y cenar alimentos ligeros antes de las ocho de la noche.

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