De aprobarse la reforma hacendaria propuesta por el ejecutivo federal, los trabajadores podrían perder el 1% de su cuenta de ahorro para vivienda, por el concepto de seguro de desempleo, comentó el socio de la firma de consultoría KPMG, Jorge Zavala Uribe.

Actualmente, explicó, los patrones destinan 5% de aportación al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), pero en la propuesta de reforma solamente se estima una aportación de 3%, de la cual 1% se destinará del seguro de desempleo, y sólo 2% se destinará al ahorro de vivienda.

Las personas que estén desempleadas podrán tener acceso a un apoyo económico hasta por seis meses, en los que les otorgará un salario mínimo mensual, detalló Zavala Uribe.

El también especialista en capital humano y obligaciones estatales, añadió que si durante su vida laboral, el trabajador no hace uso de este seguro, el porcentaje retenido se perderá.

A quienes coticen con uno o dos salarios mínimos ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), no le será retenido este porcentaje, por lo que de quedar sin trabajo, el gobierno absorberá los gastos para el pago del apoyo.

Ante el cuestionamiento sobre si los empresarios no podrían evadir las cuotas patronales para no destinar el 3% a las cuentas individuales, Zavala Uribe aseguró que esto no es posible, ya que el sistema del IMSS no reconoce las aportaciones mínimas, sobre todo cuando se registra una profesión que tiene asignada un salario superior de acuerdo a los salarios mínimos profesionales.

Integrantes de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) se mostraron preocupados ante esta iniciativa, debido a la desinformación que existe al respecto.

Jorge Zavala expuso que cuando el desempleado quiera hacer uso del fondo correspondiente a este segmento, primero se le dará el dinero que tenga ahorrado en su cuenta, y si estos recursos no son suficientes, la federación complementará los gastos para cumplir con esta obligación que propone.

La reforma considera que para acceder a este beneficio, la persona deberá tener al menos 45 días sin empleo y haber cotizado al menos 24 semanas en los últimos tres años, además de no recibir un apoyo económico de otra índole.

También deberá acreditar la asistencia a cursos de capacitación por parte de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), esto último con el fina de que al momento de emplearse el personal vaya mejor capacitado.

Pensión universal

Como parte de las prestaciones sociales que plantea dicha reforma hacendaria, está la instauración de la pensión universal, con la cual se beneficiarán a los adultos mayores de 65 años o más, siempre y cuando no estén pensionados por alguna de las instituciones de seguridad social.

El gobierno federal propone un apoyo de mil 92 pesos mensuales para las personas beneficiadas por esta pensión.

Este monto se ajustará anualmente, con base en los cambios inflacionarios que tenga la economía, citó Zavala Uribe.

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