El secretario de Gobierno del estado, Juan Carlos Espinosa Larracoechea, aseguró que sí existen y ya se mostraron los documentos del Plan Estatal de Seguridad Pública y el estudio técnico sobre el sistema del transporte público metropolitano.

El pasado martes, Luis Bernardo Nava (quien lidera los trabajos de recepción del gobierno entrante) informó que en la primera etapa del proceso correspondiente se omitió la entrega del Plan Estatal de Seguridad Pública, así como el estudio técnico sobre RedQ.

La omisión fue calificada por él como “preocupante”, pues, explicó, los documentos constituyen una base de trabajo para la próximo administración.

“Existe el estudio desde inicios de la administración; es el plan en materia de seguridad, mismo que se armoniza con el nacional y va de acuerdo también con los municipales. El plan existe y se entregó”, explicó Espinosa.

El secretario también aseguró que todas las dudas y documentos solicitados por el gobierno electo han sido resueltos, o bien se resolverán en su debido momento.

“Hemos estado presentes en todo el proceso; habíamos acordado con el equipo de transición un primer grupo de reuniones. Empezamos a dar información de manera discrecional, también nos han enviado cuestionarios para solicitar información detallada. Seguimos en esa parte del proceso”.

Afirmó que todos los datos solicitados se han entregado, sin embargo, sólo se concluyó una etapa de la entrega-recepción. Por eso, los días siguientes mantendrán la cercanía con ellos.

“Nos volveremos a reunir con el objetivo de que todo sea transparente. Al día de hoy debemos correr esta primera etapa con todas las dudas que se nos fueron entregando. Se dieron cuestionarios por dependencia, cada uno de los titulares cubrió la información que le corresponde”.

Espinosa Larracoechea explicó que, en la primera etapa, el equipo de transición se reunió con cada una de las dependencias de primer nivel que operan en el gobierno estatal.

Por otra parte, acerca de los mil 112 trabajadores que operan por honorarios, afirmó que no constituyen riesgo alguno, pues son personas necesarias para la operatividad de las dependencias.

Será entonces la nueva administración la que defina bajo qué esquema laboral operará el personal que quedará a su cargo.

“Para nada es un número extra. Son gente que no tiene base, sin embargo, ante la necesidad en la administración pública, prestan sus servicios”.

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