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El proyecto de la Guardia Nacional abre peligrosamente la puerta de la militarización, el centralismo y la tentación del ejercicio autoritario de parte del gobierno federal, señaló el presidente municipal de Querétaro, Luis Nava Guerrero.
Al participar en las audiencias públicas que organiza la Cámara de Diputados para analizar el proyecto que propone la creación de la Guardia Nacional, el alcalde panista aseguró que ante la emergencia nacional que en materia de seguridad vive el país, sería una irresponsabilidad actuar con precipitación y con medidas incompletas, tal como lo plantea actualmente la Federación.
“Hacemos un reconocimiento sin paliativos a las fuerzas armadas del país, son ejemplo de lealtad y solidaridad con los mexicanos, hace falta su colaboración, pero no podemos confundirnos, por sí misma la Guardia Nacional no resuelve la crisis de inseguridad; la Guardia no es un modelo de seguridad pública y lo que la República demanda es justamente eso. No confundamos un componente con un nuevo modelo”, manifestó.
El país no será más seguro por detener a más delincuentes, subrayó Nava Guerrero, quien dijo que la apuesta más sólida para resolver el problema de inseguridad que vive el país, es implementar acciones de prevención con la participación de los municipios, junto la coordinación y apoyo de los estados.
“Hablemos de prevención, y también de una sociedad de paz como hemos propuesto en Querétaro, donde se busca erradicar la violencia en las escuelas y en los hogares; se debe combatir la violencia de género; formar policías locales bien preparados y bien pagados, pero no nos ayuda si el gobierno federal nos recorta el 20% del fondo para el fortalecimiento de la seguridad”.
Las estrategias de seguridad, explicó, deben ser diseñadas y comandadas por autoridades del orden civil que tengan una perspectiva democrática y ciudadana, pero no a través del mando militar.
Luis Nava insistió en que el modelo de seguridad del gobierno federal debe basarse en el respeto a la Constitución y en la preeminencia de las autoridades locales y los mandos civiles.
En caso de aprobarse la actuación de una Guardia Nacional, indicó, se deberán reconocer los límites y directrices que establece el principio del federalismo en México.
Señaló que con la creación de la Guardia Nacional se inicia un proceso de militarización y centralismo en el país, que abre peligrosamente la puerta a la tentación autoritaria del gobierno federal, que no se puede permitir.
bft
