Indignante que ninguna autoridad levante la voz y exija justicia por un ciudadano que fue agredido por manifestarse, lamentó Mauricio Ortiz Proal, diputado local del PRI; esto con respecto de la agresión en contra de Arturo Rueda Zamorano, líder de comerciantes de avenida Ezequiel Montes.

El legislador expuso que independientemente de filias partidistas, todos deberían indignarse por un hecho “tan cobarde” en el que se reprime a un ciudadano por manifestar sus ideas, lo que es grave y lamentable en el estado.

Reconoció en el gobernador del estado, Francisco Domínguez Servién, a la única persona que ha remitido mensajes coherentes al pedir que se socialice la obra que está a cargo del gobierno municipal de Querétaro.

Aseguró que si el gobierno en turno fuera diferentes “ya se estarían rasgando las vestiduras” exigiendo justicia, pero hasta ahora nadie ha hablado, al tiempo de lamentar el discurso del presidente Marcos Aguilar Vega que en lugar de pedir la aclaración del hecho diga que “no le tiene que pedir permiso” a los ciudadanos para hacer sus obras y recordó que los gobernantes deben basarse en dos grandes principios: el de la legalidad, para hacer lo que permite la ley, y el de legitimidad, que consideró el más importante y que se refiere a contar con el respaldo de los ciudadanos para tomar decisiones.

Acciones como estas, dijo, ponen en riesgo la gobernabilidad del estado y particularmente del municipio.

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