El director de Profesiones del estado Juan Pablo Sosa, informó que los derechos federales para tramitar la cédula profesional en la entidad aumentaron de precio, mientras que a nivel local se conservará el costo del trámite que para muchos profesionistas es obligatorio, aunque en 2016 disminuyeron las solicitudes.

El funcionario municipal comentó que el año pasado se tramitaron seis mil 800 cédulas en la entidad, lo que representa 13% menos que en 2015, ello principalmente por lo lento del proceso, pues incluso en algunos casos se tardaron hasta 10 meses en entregarlas.

“Se estaban tardando algunas (cédulas) hasta 10 meses. Hay excepciones como las de médicos especialistas que se están tardando más, pues se le está pidiendo a un organismo que dé visto bueno. Tiene que ver más con los médicos y los especialistas”, explicó.

Aseveró que los problemas que se tuvieron a principios del año pasado, con el retraso en la entrega de cédulas profesionales, se solucionó en el último trimestre del año, e incluso los trámites se han vuelto más rápidos, llegando a tiempos de dos meses. Dijo que las cédulas tardan este tiempo sin importar para qué licenciatura son.

Sobre los costos, comentó que en el trámite estatal no habrá incrementos, pero en el federal se dará un ajuste, que les definirán en la primera quincena de enero. “Tenemos los derechos federales y los derechos estatales. Los derechos federales, el año pasado estaban en mil 88 pesos, y los estatales en 544 pesos. Pero habrá que esperar entre cinco y 10 días para que nos definan las nuevas tarifas”, subrayó.

Agregó que los aumentos que se dan por regular son de 5%, pero este año, con la situación económica que se vive en el país, con el aumento de precio de los energéticos, no se descarta que el ajuste sea diferente.

Sin embargo, sostuvo que espera que el aumento no impacte en el número de profesionistas que acuden por su cédula, pues el precio no se compara con los que se deben de cubrir por la titulación, pues en ocasiones son de 10% del monto del título.

“Aquí el principal problema es la desidia. Reciben el título, reciben el papel, pero como que siente que con eso terminaron el ciclo. La mayoría de los casos que tenemos aquí para registrar la cédula es realmente por obligación. Luego tenemos a gente muy acelerada, con muchas urgencias, con títulos de hace cinco años”, acotó.

Subrayó que es importante promover ese cambio cultural entre los profesionistas, para que tramiten lo más pronto posible su cédula profesional, pues en algunos casos la piden de manera obligatoria, como en los abogados, médicos, especialistas de la salud, psicólogos, contadores públicos, ingenieros civiles y arquitectos.

Añadió que “ahora también se les empiezan a pedir a maestros. Entonces nunca sabes cuándo vas a dar clases, cuándo vas a cambiar de trabajo”.

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