Autogestión, autoempleo, organización, responsabilidad son conceptos que muchos pensaríamos serían ajenos a jóvenes de 19 o 20 años. Sin embargo, son cada vez más frecuentes los casos en los que la conciencia del esfuerzo para salir adelante llega a una corta edad, y en algunas veces sin dejar de divertirse.
Raúl Niño y Ernesto Mendoza de 19 y 20 años, respectivamente, desde hace dos años encabezan el NM Crew, un colectivo conformado por jóvenes que, al igual que ellos, se mantienen alejados del mundo comercial y apuestan por el underground tanto para divertirse como para ofrecer espacios alternativos de convivencia para quienes gustan de los raves y la cultura de la música electrónica.
Afición e inquietud por la música compartida por estos dos jóvenes, es por que desde hace unos años, a la par de la creación del crew, nació la organización de eventos de música electrónica con la finalidad, además de que los asistentes se diviertan, de reunir recursos e invertirlos para instalar un estudio de grabación.
En este lugar, propiedad de Ernesto, los integrantes del colectivo, algunos raperos y MC's, pueden grabar sus materiales discográficos. Además el crew está compuesto por otros jóvenes DJ’s, diseñadores y fotógrafos, quienes han encontrado una forma de generar y alimentar sus propios espacios organizando eventos.
Lejos del mundo comercial, los eventos privados que estos jóvenes han organizado, comienzan a hacer eco entre aquellos aventurados nocturnos que buscan sitios para disfrutar beats a altos decibeles.
“Todo empezó como un grupo social, nuestro primer evento se creó para apoyar la música electrónica y de ahí nació el crew que se llama NM, que significa Night be money (Dinero nocturno en español). Tenemos DJ's, diseñadores, fotógrafos y una serie de personas que nos apoyan con la publicidad. Empezamos desde abajo, empezamos a contactar gente y comenzaron a crecer los eventos, son dos años los que cumplimos como crew”, contó Raúl.
La hermandad nació con la repentina amistad entre los dos jóvenes, tras encontrarse una vez en Plaza de Armas, cuando Raúl le compró a Ernesto las entradas de un evento.
“Ese día platicamos de música y vimos que coincidimos en muchas ideas, ahí fue cuando me contó que quería hacer un crew”, contaron en entrevista con EL UNIVERSAL Querétaro.
“Desde ese momento nos frecuentamos más, al principio éramos varios pero el grupo se hizo más cerrado para quedar compuesto por pura gente con responsabilidad que está comprometida en dedicar tiempo y esfuerzo para llevar a cabo los eventos”, destacaron.
“Ya con quienes quedamos al final, mandamos a hacer nuestras playeras y gorras del crew, en total, luego de dos años, somos nueve integrantes. Actualmente entre todos planeamos las fechas de los eventos e invertimos en partes iguales, luego se reunirnos y acordar lo que necesitamos para realizar cada acontecimiento “para ver que se necesitará para cada evento”, añadió Raúl.
Para Ernesto, su idea de crear un crew se ha cristalizado, funciona y los eventos llegaron simplemente “por el gusto de la música. Mi mayor motivación es ver a la gente bien prendida, bailando”, afirmó.
“Que la gente disfrute y valore el trabajo, que pregunte cuando haremos otro evento es lo que nos motiva a seguir con los raves”, continúo.
“A veces se gana, a veces se pierde de esta inversión, pero lo importante es seguir juntos, unidos, tratando de complacer a la escena rave y underground”, añadió Raúl.
Originarios de Santa Rosa Jáuregui y de la colonia El Rocío, desde que se conocieron Raúl y Ernesto lograron fundar el crew; además durante los últimos dos años han organizado decenas de raves, que por la calidad, han aumentado el número de asistentes.
“El evento más grande que hemos hecho ha sido de 800 personas, fue hace dos años, se llamó Valentine's Day. En el más reciente, que tuvimos en marzo, recibimos a 500 personas lo hicimos con temática de pool party y fue lejos del centro, en Santa Rosa Jáuregui, algo que tratamos de hacer normalmente para evitar molestias o problemas con los vecinos o que llegue la policía. Nos fue muy bien, el evento gustó porque trajimos DJ's de otros estados del país, de renombre en la escena, quienes nos han dicho que vamos por buen camino”, contó Raúl.
Recibir etiquetas por sus gustos musicales, su forma de vestir, lo que les gusta hacer de parte de algunas personas no es ajeno para ninguno de los integrantes del crew.
“Desde pequeño me gustaba la música electrónica, me dedicaba a bailar, después empecé a escuchar algo más pesado, el psytrance, me enteré de los raves, empecé asistir a varios y me gustó la escena, las personas que asistían a esos lugares. Siempre era convivir en un espacio de paz, libre, escuchando música y sin dañar a nadie, aunque también me he encontrado personas que me dicen que por ir a los raves soy un delincuente, un vago, nos etiquetan pero lo que tratamos de dar a entender es que un rave significa armonía, estar en un lugar tranquilo, escuchar la música que a uno le gusta”, agregó Raúl.
Pese a que los detractores que no comprenden la cultura underground, el grupo se considera una familia “el crew se apoya en los eventos como y en sus problemas personales, es importante para que todo funcione”, destacaron.
Eventos patrocinados
Algunos raves son organizados con el respaldo de algunos patrocinadores particulares, nada de grandes emporios comerciales ni de autoridades estatales, que han creído en los jóvenes, quienes han llevado a su afición musical a otro nivel para que el crew funcione como una microempresa que ofrece espacios alternativos de diversión al creciente público que ha comenzado a conformar una nueva escena en la ciudad.
Sin embargo, tienen cuidado, reconocieron que este tipo de eventos deben hacerse en lugares retirados para no molestar a nadie y ocasionar que termine la fiesta. Por esta razón, la ubicación de los raves se revela con uno o dos días de anticipación y no es una información pública sino que los organizadores la comparten a los interesados a través de mensajes privados en sus redes sociales.
Son jóvenes que a su corta edad saben que si quieren subsistir en un complicado mundo musical y social, deben esforzarse el doble porque su elección de vida sale del molde.
Sin embargo, su entusiasmo es evidente. El éxito con sus eventos ha servido para que ellos mismos, los integrantes del crew, puedan cristalizar sus inquietudes musicales en un estudio de grabación, propiedad de Ernesto, lugar en donde crean piezas y hacen rimas, los apasionados del hip hop.
Revelaron que la idea es convertirse en un colectivo artístico que apoye la escena, a los grupos, al ofrecer servicios integrales de grabación y edición de audio, fotografía y video; además de generar sus propios espacios de exposición con la organización de eventos.
Por ahora ya tienen fecha para su próximo evento, será el 3 de junio, el cual se llama “Espectral Trance”, con motivo de la celebración de dos años del colectivo NM y de paso festejar el cumpleaños de Ernesto; por lo que se contará con la presencia de DJ's locales y de otros estados del país, para el cual ya se inició con la debida promoción.
Con su actividad, Raúl y Ernesto han demostrado que la noche no es sólo para divertirse.
