La Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) se encuentra al borde del colapso financiero al incrementar 113% el gasto de la nómina en nueve años; se estima que en octubre no podrá pagar el salario del personal permanente y transitorio, ni jubilaciones.

De acuerdo con un informe presentado ante el Congreso estatal por el rector de la institución, Eduardo Bautista Martínez, en tres o cuatro años —en 2020 o 2021—, la casa de estudios se declarará “insolvente”.

El rector acusó que existe un trato preferencial por parte de los legisladores locales, debido a que al Sistema de Universidades Estatales de Oaxaca (Suneo) se le asigna 82 mil pesos por estudiante al año y a la UABJO sólo le dan 41 mil pesos por alumno al año. Un estudio realizado por la empresa Integradora Corporativa Empresarial SC —contratado por la misma universidad—, evidencia que la crisis financiera fue causada por la mala administración. La investigación contiene la información al 31 de diciembre de 2016 y fue presentado en abril.

Malos manejos. En 2008 la UABJO, con ingresos por 483 millones 385 mil pesos, gastó 450 millones 145 mil pesos en nómina y prestaciones ligadas y no vinculadas al salario; con otros gastos de operación, los egresos fueron de 585 millones 651 mil pesos y pérdidas extraordinarias que dejaron un déficit de 211 millones 986 mil pesos ese año.

En 2011, en el rectorado de Rafael Torres se logró un presupuesto de 803 millones de pesos, pero aumentó indiscriminadamente el gasto en Servicios Personales. Con un presupuesto para el ejercicio fiscal 2017 de 941 millones de pesos, la nómina cuesta a la universidad 959 millones 850 mil pesos, es decir, 18 millones 850 mil pesos del presupuesto asignado.

El aumento en los egresos de 113% en nueve años para el gasto de la nómina no corresponde con la matrícula, debido a que en 2008 tenía 45 mil estudiantes, actualmente cuenta con 25 mil estudiantes, según el estudio. La contratación de más personal se realizó sin la autorización de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

En 2008, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) encontró que la UABJO sólo tenía autorizadas 15 mil 874 plazas, de las cuales 609 eran de personal académico de tiempo completo, 118 mandos medios y superiores, mil 190 de personal administrativo y 13 mil 957 de hora asignatura. Pero la universidad pagó salarios a 87 mil 841 personas, 71 mil 967 más de las autorizadas por la SEP y entre ellos a 197 personas de mandos medios y superiores no reconocidos. La misma situación se repitió en la auditoría de 2013, cuando se detectaron pagos por 205 millones 633 mil 300 pesos de sueldos de 2 mil 963 plazas que no se encuentran autorizadas por la SEP.

El estudio realizado por la Integradora Corporativa Empresarial detalla que los gastos que genera la universidad corresponden principalmente a erogaciones por pago de servicios personales. Estos ascienden a 959 millones 850 mil pesos, de los cuales más de 241 millones de pesos corresponden a remuneraciones adicionales y especiales, más de 101 millones de pesos de prestaciones de estímulos a servidores públicos y más de 101 millones de pesos de otras prestaciones.

En contraste, apenas destina 206 millones 447 mil pesos en servicios generales y gastos de inversión.

Al cierre del año pasado, la casa de estudios presentó un déficit de 2 mil 589 millones 290 mil 410 pesos, de acuerdo con el estudio.

El rector Eduardo Bautista solicitó a los diputados locales una ampliación presupuestal por 241 millones 668 mil 165.5 pesos para la UABJO. Advirtió que la universidad no tiene recursos para pagar el aumento salarial autorizado por la Federación, con el que se integraría un fondo para la liquidación por jubilaciones en el actual ejercicio 2017.

Google News

TEMAS RELACIONADOS