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Guardada en una caja de madera, el presidente electo Andrés Manuel López Obrador conserva un recuerdo especial en su oficina de la casa de transición. Envuelta en papel de china color blanco se encuentra la banda presidencial que, bajo la figura de presidente legítimo, recibió en noviembre de 2006 en el Zócalo capitalino.
Personal cercano al próximo mandatario confirmó a EL UNIVERSAL que desde 2007 la banda fue guardada. Llegó primero a la oficina que él tenía en la sede del partido, ubicada en la calle San Luis, en la colonia Roma; fue trasladada hace unos meses a su actual despacho en la calle Chihuahua.
El diseño fue elaborado por artesanos de Olinalá, Guerrero, cuenta César Yáñez, quien aún funge como vocero de López Obrador. Tiene estampada la imagen del águila devorando una serpiente, pero está de frente, a diferencia del emblema de la banda oficial que porta el presidente Peña Nieto, en la que el águila se muestra de perfil. Yáñez agrega: “La imagen de esa águila, como presidente legítimo, finalmente se la quedó Movimiento Ciudadano como logotipo de partido”.
Pero este no es el único objeto querido en la casa de transición que se encuentra decorada con muchos de los objetos que fueron obsequiados a López Obrador en sus distintos recorridos por municipios del país a lo largo de doce años. Por ejemplo, en la sala de juntas donde se llevó a cabo la fotografía oficial con el secretario de estado norteamericano, Mike Pompeo, y una comitiva de ese país el 13 de julio, destaca al fondo un cuadro con el retrato de Benito Juárez, que también fue elaborado y obsequiado al próximo presidente por artesanos guerrerenses durante su segunda campaña presidencial en 2012.
“Es un trabajo hecho en Olinalá. No es una pintura, sino un maravilloso trabajo de papel recortado hecho por artesanos locales. Ellos también le dieron el cuadro de un águila, en aquel tiempo en que éramos gobierno legítimo”, precisa Yáñez.
En ese mismo salón destacan también algunas figuras decorativas que formaron parte de la fotografía oficial que se tomó el 25 de julio con la visita oficial de la canciller canadiense, Chrystia Freeland. Son las esculturas de Lázaro Cárdenas, Morelos, Juárez, Zapata y Villa. Todas están elaboradas en bronce, obsequios también recibidos por el entonces candidato en alguna gira entre 2012 y 2018.
Yáñez destaca que López Obrador siempre recibe todo tipo de regalos: fotografías, frutas, verduras y objetos con significado histórico. “Para él todos son importantes, pero por el espacio no nos da para todo”, resalta.
Es por eso que otros colaboradores del próximo mandatario confirmaron que muchos de esos objetos fueron llevados a su casa en Tlalpan o bien, a la de Palenque, Chiapas. Por ejemplo, en el primer inmueble se encuentran dos objetos preciados para el tabasqueño: una pequeña bandera de México con escudo bordado, similar en tamaño a las de adorno para escritorio. Le gustó tanto, cuentan, que él decidió colocarla en su sala. Mientras que en su comedor se aprecia una mazorca de maíz hecha con tela de fieltro, bordada a mano, y la colocó allí, explican, porque el maíz es base en la historia de nuestro país.
¿Quién, cuándo o dónde se le regaló?
Difícil saberlo. Tanto César Yáñez como otras fuentes consultadas explican que los innumerables obsequios que recibe el próximo presidente en propia mano o bien, que llegan a alguna de sus casas u oficinas, tienen un denominador común: no siempre se puede determinar con precisión su origen, porque de pronto es imposible conservar datos o rastro de cada uno de ellos.
Lo que es un hecho es que entre los obsequios más frecuentes, López Obrador recibe café, pues la gente sabe que es una de sus bebidas favoritas. “Café de grano, de cualquier lugar, sea de Chiapas, Puebla o cualquier región del país”, señala una de las fuentes consultadas. “Es algo que él aprecia y disfruta a cualquier momento del día. Lo mismo dulces típicos, sean camotes, galleta de pepita, charolas con glorias y hasta carne seca”.
También han llegado a sus manos libros de todo tipo, de esos que el futuro presidente atesora. “Especialmente los relacionados con Juárez y Madero. Ha recibido muchos y son los que predominan en el enorme librero del estudio que tiene en su casa de Tlalpan, cuyo tamaño es de piso a techo conformado por tres paredes”, describe otra fuente cercana.
Destacan también innumerables imágenes religiosas que el tabasqueño ha recibido a lo largo del país. “Le regalan de todo: rosarios, vírgenes, imágenes, artesanías de este tipo. Aunque es importante mencionar que la mayor parte de ellas son para llevar en su cartera o bolsillo”. Y la mayor parte de ellas, señala la fuente, llegaron a partir de 2005, durante la etapa de su desafuero como jefe de Gobierno, y en 2006, tras los resultados que no le dieron la victoria electoral.
bft
