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La tarde cae en La Cañada. Las parejas pasan de cuatro en cuatro a mostrar sus mejores pasos, mientras los diferentes grupos interpretan alegres melodías y el huapango invade la cabecera municipal de El Marqués.
La Plaza San Pedro luce llena para el Quinto Concurso Nacional de Huapango de esa localidad, un tanto lejana de la huasteca, pero rica en tradiciones y expresiones artísticas.
Los visitantes pueden escuchar las notas musicales desde cuadras antes de llegar a la sede del evento. Ya más cerca, el olor de los diferentes antojitos tradicionales les da la bienvenida.
Puestos de guajolotes, gorditas de migajas, elotes, sopes y alitas en sus distintas modalidades se ubican en la calle Venustiano Carranza, a un costado de la plaza que luce llena de los aficionados y familiares al tradicional baile y música.
Más arriba, puestos de dulces típicos e indumentaria llenan el recinto, justo frente al Palacio Municipal. Los músicos y el templete donde pasan las parejas se encuentra en la explanada que se ubica un poco más abajo de la plaza, de fondo las letras monumentales de “El Marqués” decoran el escenario.
Las parejas que no alcanzaron las semifinales comen algo en los puestos de comida, siendo muy socorridas las alitas, principalmente las aderezadas con chile habanero, “pa’ que piquen sabroso”, dice un joven que solicita una orden a la vendedora.
La música solo para por unos minutos, cuando la maestra de ceremonias pide a las parejas pasar al templete. “Parejas 124, 165, 114 y 139, a semifinal de estilo hidalguense”, dice.
Antes, por la tarde, en la inauguración, Omar García Vázquez, director de Cultura, dijo que fueron siete estados de la República Mexicana los que tienen representantes en este concurso que para esta edición se calificó como campeonato nacional.
Señala que esperan 250 parejas inscritas, quienes aún en la tarde se apuntaban para participar.
