Vecinos de diferentes calles en la colonia Lomas San Ángel viven en la incertidumbre debido a que los muros de sus casas comienzan a presentar fracturas; la constructora asegura que no es problema de ellos y son daños causados por los vecinos.

La falta de cimentación y un terreno inestable es lo que está generando que las casas se resquebrajen por el peso de las mismas y el asentamiento de la estructura, dicen los vecinos; diferentes cuarteaduras han comenzado a aparecer en los muros, y las bardas perimetrales están cerca del colapso.

Los vecinos mostraron las diferentes grietas y fallas que las casas presentan, mismas que tuvieron un valor comercial de 400 mil pesos directamente con la constructora.

A pesar de las diferentes quejas, los encargados de la obra indican que estas “pequeñas fallas” son normales en cualquier construcción.

Las recientes lluvias que han azotado la capital queretana han ocasionado que los cimientos de las casas se hundan, dejando el concreto sin base de sustentación.

“Las casas están presentando cuarteaduras y diferentes desperfectos que la constructora no quiere aceptar, nosotros las recibimos hace un año y cada día que pasa las grietas son mayores; no hay día que no aparezca una grieta nueva en los muros, hay filtraciones por los techos, humedad en las paredes y la constructora sólo llega con pistolas de silicón para rellenar las grietas, pero eso no corrige los problemas. Hasta el momento la constructora no ha hecho nada para ayudarnos y pues nosotros ya presentamos demandas ante PROFECO y siguen las penales por fraude”, explicó Ángel Ocadiz Quintanar, habitante de la colonia.

María del Carmen Solano, otra vecina, explicó que incluso las calles han sufrido hundimientos, “hace menos de seis meses la calle estaba parejita, y ahora tiene un vado. A nosotros nos aseguraron que las casas no iban a presentar fallas”.

La unidad municipal de protección civil realizó un estudio para evaluar las condiciones en las que se encuentran las casas. Según el dictamen las casas tienen vida útil de tan solo seis meses y después deben ser demolidas.

Los vecinos de la calle Tabachines, en la colonia Lomas San Ángel, aseguran que la constructora no llevó a cabo el estudio de dinámica de suelos, además de que la cimentación no es lo suficientemente profunda. La representante legal de la empresa, Diana Rosales, no está dispuesta a dar entrevistas acerca de la situación que viven los ciudadanos.

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