De nueva cuenta Querétaro salió a la calle para protestar. Por cuarta semana consecutiva, la organización Querétaro Unido contra el Gasolinazo y las Reformas Estructurales convocó a una marcha pacífica, esta vez con un recorrido más pequeño, pero que alcanzó a reunir a alrededor de mil 500 personas que arribaron a Plaza de Armas.

Frente al Palacio de Gobierno, se realizaron mesas de trabajo para llegar a acuerdos sobre las medidas que tomarán en la próxima manifestación, que está programada para el 5 de febrero, fecha en la que estará en el estado el presidente Enrique Peña Nieto, con motivo del centenario de la Constitución mexicana.

Es la primera vez que algún movimiento ciudadano se reúne en una plaza pública para discutir las diversas propuestas que buscan continuar con las marchas s ante los aumentos del precio de los combustibles, además de otros servicios básicos.

Fue en punto de las 16:28 horas cuando inició el andar del contingente, media hora después de la hora fijada para el encuentro, que esta vez tuvo como salida el cruce de la avenida Constituyentes y la calle Corregidora, precisamente en donde se encuentra una gasolinera de Pemex, a un costado de la Alameda Hidalgo.

Sobre sale el grito de un niño al frente del contingente. “Únete pueblo y seremos más”, invita el pequeño con su pregonar mientras camina junto a su mamá, quien lo toma de la mano y también toma aire para expulsar la siguiente consigna.

Incluso, en algún momento de los primeros pasos del contingente, le pasaron un altavoz para alentar a los demás asistentes.

Es la cuarta marcha que la organización de ciudadanos que se realiza consecutivamente. Desde el punto inicial, avanzan alrededor de mil manifestantes. Todos con pancartas, lonas, cartulinas, donde las frases de rechazo complementaban el unísono grito de “¡Fuera Peña!”

“La patria no se vende, se ama y se defiende”, “Ni PRI, ni PAN, ni PRD, queremos al pueblo al frente del poder” y la frase “Si no hay justicia para el pueblo, que no haya paz para el gobierno”, son las consignas que se escuchan en el recorrido, durante el cual se fueron sumando más personas.

Cerraron Zaragoza y Corregidora a las 16:35 horas. El contingente tarda alrededor de 10 minutos en cruzar completo y liberar la vía. Aunque recortaron el recorrido, la intensidad es casi igual a la semana pasada, cuando marcharon desde Calzada de los Arcos y Bernardo Quintana.

A las 16:45 horas el contingente dio vuelta en el Andador 5 de mayo y, cinco minutos más tarde, la punta de la marcha arribó a Plaza de Armas. Ahí estaban colocados una decena de tablones y cientos de sillas, pues la convocatoria, además de protestar, serviría también para discutir algunos puntos medulares del movimiento.

Cuando todo el contingente ya estaba en la plaza, se dieron las instrucciones. Se realizaron mesas de trabajo en torno a cuatro temas mediante consenso mayoritario: las acciones para protestar el próximo 5 de febrero; las acciones de desobediencia civil pacíficas a ejercer; las exigencias del movimiento ciudadano ante los tres poderes del Estado y, finalmente, se recibieron los documentos para el amparo colectivo contra el gasolinazo.

Más de una hora después, ya con la cantidad de gente disminuida en la plaza, se leyeron los acuerdos de cada mesa, en la que destacó la organización para el domingo 5 de febrero, día del centenario de la promulgación de la Constitución de 1917, en el que se alistará una concentración en el Cerro de las Campanas, en donde se hará un acto simbólico para fusilar a los representantes del mal gobierno para el que definirán la hora en próximos días.

Asimismo, todas las propuestas serán públicas a través de la página de Facebook del movimiento.

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