La Secretaría de Extensión Universitaria de la UAQ concluyó la segunda edición del seminario Profesionalización para la Difusión Cultural Universitaria, que impartió Ingrid Lozano Woolrich, miembro del Sistema Nacional de Capacitación del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta).

Como parte de las actividades del curso, se contó con una conferencia de Antonio MacGregor, docente de la UAQ, en la que habló sobre el origen de la cultura en México y la importancia de generar recurso humano para su promoción y difusión.

Lily María Sigie Carrillo, coordinadora del evento, detalló que el seminario tuvo el objetivo de colaborar, de manera institucional, a la formación, capacitación y profesionalización de gestores culturales en la universidad, con el fin de contribuir a que los docentes y administrativos laboren en áreas culturales afines y tengan un perfil óptimo para realizar sus actividades.

En esta segunda edición participan 28 personas, el seminario tiene validez oficial por parte de la Secretaría de Educación Pública, el Conaculta y la UAQ; tuvo una duración de 32 horas, distribuidos en seis días: dos jueves, dos viernes y dos sábados de noviembre.

El seminario constó de seis módulos: El desarrollo holista y la educación integral, que buscó dar a conocer la importancia del arte en la vida de los universitarios, a través de la sensibilización y apreciación artística y cultural, dirigido hacia la conformación holística.

Identidad y Cultura, los procesos de introspección y la construcción de la identidad, que interiorizó los procesos que constituyen la identidad. El enfoque social de la cultura, una aproximación a la responsabilidad universitaria, abordó las corrientes que permiten concebir la vocación social de la cultura y la de la Universidad como institución.

El proyecto cultural y la planificación estratégica. Una herramienta para la reconstrucción del tejido social abarcó la estructura y definición de cada uno de los conceptos que conforman el proyecto.

Los bienes culturales, su dimensión económica y simbólica distinguió las dos dimensiones que conforman los bienes y servicios culturales, para comprender su función social y económica. La sexta unidad, El financiamiento cultural, retos y alternativas de la procuración de fondos presentó modelos que conforman la procuración de fondos en el sector cultural.

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