Alrededor de 12 automóviles particulares fueron arrastrados por la corriente de agua y resultaron dañados con enormes piedras, tras el afluente que ingresó al fraccionamiento Claustros del Parque, cerca de la avenida Fray Luis de León, luego de que la barda perimetral se venciera por la gran cantidad de líquido que se acumuló en una fábrica continua.

El agua ingresó y arrastró todo a su paso, incluyendo los vehículos, algunos de los cuales dejó a más de 50 metros de distancia de donde se encontraban estacionados.

Los vecinos se organizaron la mañana de ayer para realizar la limpieza de sus vehículos y viviendas, mientras esperaban la posible ayuda de las autoridades.

De acuerdo con los habitantes de la calle San José de Gracia, todo se originó cerca de las nueve de la noche del pasado lunes, cuando la constante lluvia provocó que una barda construida de cantera cayera al no soportar la cantidad de agua que se acumuló del lado de la empresa Industria del Hierro, por lo que el afluente arrastró lodo, piedras, maleza y basura.

Luis Signoret, vecino afectado, detalló que su automóvil fue el más perjudicado, pues fue arrastrado varios metros y golpeado por enormes rocas que provocaron más daños en toda la carrocería de este y de los demás autos estacionados.

A decir de las víctimas, la situación que se vivió la noche del lunes les generó temor e incertidumbre, pues según sus declaraciones, este problema se pudo haber evitado.

“De repente llegó este coche que ves arriba de la jardinera, arrastró a los demás. Digo, a nosotros no se nos inundó, pero de aquel lado sí estuvo muy fuerte y se rompió la barda y no es la primera vez; los vecinos de aquel lado ya habían reportado que esa barda era peligrosa y pues ya vez, reventó”, dijo Jorge Ortega.

En el mayoría de los casos, las compañías de seguros responderán por los daños que presentaron los automóviles, y por las viviendas, los mismos vecinos llevarán a cabo los trabajos necesarios en conjunto con el comité de colonos.

Asimismo, miedo e incertidumbre imperan las calles de la colonia Fray Junípero Serra, al norponiente de la capital del estado, donde cerca de 30 familias se vieron afectadas por una corriente de agua que derribó la pared trasera de sus viviendas e ingresó a los inmuebles para llevarse y destruir todo a su paso.

Tal es el caso de la familia Velázquez Velázquez, que tuvo que salir por una ventana de su casa para evitar una tragedia mayor, luego de que el agua alcanzó una altura de 1.60 metros dentro de la vivienda.

De acuerdo a Gelasio, quien es padre de cinco niños, la lluvia del pasado lunes los agarró por sorpresa, pues de un momento a otro se escuchó un estruendo y al reaccionar, toda su casa estaba inundada.

Los integrantes de esta familia nada pudieron hacer para salvar sus pertenencias, que fueron arrastradas y enviadas a la calle por la corriente que derribó la puerta principal.

“Yo estaba tratando de hacer un agujero en la pared para que se saliera el agua, y le dije a mi esposa ¡vete con ellos, sálganse por la ventana!, ya después que no podía hacer nada, salí corriendo a buscarlos y ahora sí que yo hasta pensé ‘el agua ya se los llevó’, es algo fuerte que se te viene y no puedes hacer nada, piensas en tu familia, piensas en todo, piensas en lo peor”, dijo Gelasio Velázquez.

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