Desde un lápiz, goma o sacapuntas, hasta una corbata, mascada o rompevientos, sirven como lienzo para plasmar los aviones que identifican a los estudiantes de la Universidad Aeronáutica en Querétaro (UNAQ).

Estos y otros artículos forman parte de la tienda universitaria de la institución, que a la fecha cuenta con alrededor de 70 diferentes productos en inventario.

Laura Jiménez, jefa del Centro de Información de la universidad, y encargada de la UNAQ Shop, explica que este proyecto comenzó a trabajarse hacia finales del 2009

El objetivo, agrega la administrativa, es generar identidad dentro y fuera de la institución educativa, pero sobre todo entre los alumnos que cursan alguna carrera.

La tienda se concretó entre los años 2012 y 2013, quedando a cargo del Centro de Información de la Universidad Aeronáutica en Querétaro desde 2015.

“Anteriormente, la administración de la tienda estaba a cargo del área de vinculación; es a partir de 2015 que el Centro de Información asume la titularidad”, dice

“[Esto] con el fin de contar con horarios de atención más amplios y también por los espacios; ahora se tiene un mayor contacto con los estudiantes y con las visitas”. agrega.

Señala también que “la idea de la tienda es que los productos sean tomados por los estudiantes y por las personas externas como parte de la cultura de la universidad”.

La UNAQ Shop cuenta con tres escaparates dentro de la universidad, dos de los cuales funcionan como puntos de venta.

Al momento de comprar un artículo, se recibe el pago con dinero en efectivo y también se aceptan tarjetas de crédito y débito.

Laura Jiménez refiere que, desde sus inicios, el proyecto se ha ido nutriendo de diferentes ideas que al final se traducen en la generación de nuevos productos.

Por una parte se manejan textiles como son playeras, sudaderas, chalecos, rompevientos, corbatas y mascadas,; aunque también se cuenta con una línea de suvenires que incluye llaveros, plumas, tazas y gorras, entre otros artículos.

La encargada de la tienda indica que la institución educativa ha aplicado algunas encuestas para conocer qué es lo que más llama la atención de los estudiantes.

A partir de ello, refiere el caso de cuatro artículos básicos, que son los que presentan la mayor demanda: llaveros de avión en dos diseños diferentes, plumas y tazas.

“Es lo que más nos piden los estudiantes. Llegó un momento en el que también nos pidieron cosas de papelería, y tratamos de hacer algo más novedoso para ellos; tenemos sacapuntas, libretas, gomas, y estamos trabajando en diseños nuevos”, comparte la mujer.

Este año la Universidad Aeronáutica en Querétaro festejará los primeros diez años de su fundación, por lo que se trabaja en una línea de artículos de edición limitada.

“Otro de los puntos que estamos viendo es que haya una playera o sudadera con la mascota de la universidad, porque creemos que es darle otra identidad tanto a la tienda como a la mascota”, sostiene la jefa del Centro de Información de la institución educativa.

Cada uno de los artículos disponibles cuenta con diferentes presentaciones. De acuerdo con Jiménez, un producto puede tener hasta 10 variaciones o diseños.

“Nosotros trabajamos todo: desde la búsqueda de qué productos vamos a tener, elaborar los diseños, hasta buscar a proveedores. Incluso, atender a los clientes requiere de un trabajo arduo, porque buscamos darles una atención personalizada, para que se vayan contentos con lo que se llevan”, comenta.

Lo más barato que se encuentra en la tienda es el lápiz, que tiene un costo de seis pesos; en el extremo opuesto se ubica el chaleco, cuyo precio es de 375 pesos.

Además, de forma constante se ofrecen promociones en la UNAQ Shop, esto para que los productos sean accesibles a los clientes.

Más allá de las aulas. A futuro, la Universidad Aeronáutica en Querétaro busca contar con más puntos de venta ubicados fuera de las instalaciones de la institución.

En este sentido, se proyecta tener presencia en sitios de gran afluencia como el Aeropuerto Intercontinental del estado y el Centro Histórico de la capital queretana.

“Las personas que vienen como visitas son muy dadas a llevarse algo, aunque sea una cosa pequeña. Cuando hay cursos nos ha tocado atender a personas que se llevan inclusive más de mil 500 pesos y eso es lo que nos ayuda a nosotros a vender”, menciona la mujer.

“Hemos recibido comentarios de que ahí [en el aeropuerto o en el Centro Histórico del estado] un pequeño stand estaría muy bien, pero se nos dificulta la cuestión del personal; es algo que tenemos que definir y también el hecho de contar con las existencias necesarias u otro tipo de productos enfocados a otro tipo de público”, expone Laura Jiménez.

Otra cosa que está siendo considerada es que se pueda hacer labor de venta en exposiciones de universidades, además de que se busca que la tienda llegue a ser autosustentable, por lo que a partir de este año se comenzó a impulsar que lo que se vendió el año pasado sea lo mismo que se compre para este año.

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