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Con base en el estudio de Evaluación de la Educación Vial de Querétaro, realizado por investigadores de vías terrestres de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), se estima que el medio de transporte que más utilizan los queretanos para desplazarse —dentro de la capital del estado— son los autobuses urbanos, con un 44.20%, seguidos de los automóviles particulares, con 32.50%; las personas que se desplazan a pie representan el 10.10%, según el compilado elaborado este mismo año por los propios universitarios.
El análisis elaborado por Saúl Obregón Biosca, coordinador de la Maestría en Vías Terrestres de la Facultad de Ingeniería de la UAQ, y los investigadores Miguel Ríos Núñez, Eduardo Betanzo Quezada y José Antonio Romero Navarrete, agrega los trayectos que se realizan como acompañantes en vehículos particulares, así como a bordo de transportes escolares, taxis, motocicletas y bicicletas.
El documento compartido por medio de EL UNIVERSAL de Querétaro, establece cada una de las variables que son aplicadas a los 226 conductores consultados —en esta sección del estudio— y en donde resultan evaluados con precisión en las “técnicas no adecuadas” al momento de conducir y la frecuencia de las mismas.
Conocimiento aplicado en señales de tránsito, situación actual en seguridad vial y factor humano, infraestructura vial, cortesía y urbanidad, además de situaciones aplicadas, fueron los rubros que ponderaron los investigadores de la Facultad de Ingeniería.
En el tema del reglamento de tránsito, 80% de los conductores evaluados aprobaron satisfactoriamente las reglas básicas y de ayuda ante la falta de controles viales. Asimismo, 79% de los conductores reconocen la responsabilidad del conductor para que los menores de edad viajen seguros. Las recomendaciones para evitar accidentes por alcance también estuvieron bien calificadas en 46% de los automovilistas.
No obstante, la situación actual en seguridad vial y factor humano, es el bloque más interesante que arroja el trabajo de Saúl Obregón, Miguel Ríos y Eduardo Betanzo. Solo 26. 7% de los conductores consultados reconoció conocer a plenitud los riesgos que involucra el manejar con presencia de alcohol en la sangre. 36.6% tuvo el conocimiento para reaccionar asertivamente en situaciones de alta velocidad y 48.5% reconoció cumplir a plenitud las indicaciones.
