Luke Perry fue un hombre enfocado en el presente.
Atrás habían quedado los días en los que daba vida a Dylan McKay en la serie de los 90 Beverly Hills 90210, y desde hace dos años se había convertido en Fred Andrews, protagonista del drama Riverdale.
Ese fue el último personaje con el que se le vio en televisión. El actor falleció ayer en el Hospital St. Joseph, en California a los 52 años a causa de un derrame cerebral masivo luego de que el miércoles fue hospitalizado.
Aunque sabía que para los que crecieron durante la década de los 90 su rostro seguiría siendo el de Dylan, el actor ya había cerrado esa etapa en su carrera.
Durante los siguientes años trabajó haciendo doblaje de voz apareciendo como él mismo en caricaturas como Family guy y Johnny Bravo y con participaciones especiales en series como Will & Grace, La ley y el orden y Raising hope. Sería hasta 2016 en que el actor volvería con un protagónico en la serie Riverdale.
En ese momento, Perry sólo pensaba en el presente.
“No sé ni cómo me veré en 10 años. El tiempo lo cambia todo tan rápido que no tengo idea del futuro, creo que me gustaría cursar una licenciatura”, dijo a EL UNIVERSAL desde el set de grabación de la serie en Vancouver.
Más allá de su carrera profesional, Perry tenía una inquietud con respecto a su futuro: su familia.
“Sólo me gustaría ser recordado por mi familia como un buen papá, es lo que me preocupa ahora”, dijo.
En su vida no todo fue trabajo, Perry se convirtió en padre de familia. Se casó con Minnie Sharp, con quien tuvo a dos hijos: Jack y Sophie, y de quien se divorció en 2003 luego de 10 años de matrimonio. Fueron ellos y su actual novia Wendy Madison, además de su madre Ann Bennet y su padrastro Steve Bennet quienes lo despidieron en el Hospital St Joseph.
Hace 28 años, en la primera entrevista que ofreció a Entertainment Tonight, Perry no sabía el fenómeno en el que se convertiría su rol en Beverly Hills 902010. Con ese aire rebelde propio de su personaje, el actor se mostraba centrado.
“Como todas las series, vendrá 90210 y se irá. Habrá un día en que dirán: ‘Es todo, es tu último episodio’. Antes de que llegue el día, tenemos que esforzarnos al máximo”, dijo.
Este 2019 el último adiós en la gran pantalla para Luke Perry será en la película de Quentin Tarantino, Once upon a time in Hollywood, que aborda el caso de Charles Manson y que será estrenada a mediados de año.
Luto en Beverly Hills y Riverdale. Al saberse la muerte de Perry, la producción de Riverdale se suspendió para que sus actores se recuperaran de la noticia.
Los productores señalaron que estaban profundamente tristes por la muerte: “Luke era todo lo que usted esperaría que fuera”.
Ian Zering, quien interpretó a Steve Sanders en Beverly Hills 90210, recordó a su amigo con un emotivo mensaje en Instagram, donde aseguró que recordará por siempre los momentos que compartieron.
Kathleen Robertson, quien encarnó a Clare Arnold, lo recordó como una persona amable que la apoyó.
Emma Caulfield Ford, Susan Keats en la serie, publicó mensajes para recordar a su amigo y “ángel”, quien la hizo sentir bienvenida.
Molly Ringwald, actriz que interpreta a su esposa en Riverdale, compartió su pesar: “Mi corazón está roto. Te voy a extrañar muchísimo, Luke Perry”. Redacción y con información de Jesús Díaz.
