La 53 edición del Salón Aeronáutico de París-Le Bourget, el evento más importante de la industria aeroespacial del mundo, que se realiza cada dos años en Francia, a 35 minutos de la capital, y que ocupa por una semana el Aeropuerto Le Bourget para hacer sus exhibiciones, brinda la oportunidad de ver desfilar a diplomáticos de varios países, empresas mundiales fuertes en el rango aeronáutico, y la posibilidad de acercar la tecnología a los visitantes, coleccionistas y aficionados a los avances que en 20 años se podrán disfrutar.
Es un salón aeronáutico lleno de progresos tecnológicos y con muestras de una enorme preocupación por temas de seguridad en varios puntos del mundo, marcando intereses por el aumento de las tensiones comerciales y una notoria búsqueda para mejorar y crear cosas que perjudiquen menos al medio ambiente.
Año con año la demanda y ventas de aviones se ve fuertemente acelerada, en 2018 entre las empresas aeronáuticas más importantes como Airbus (Francia) y Boeing (EU) vendieron en este evento mil 600 aviones, lo que significa que se va a duplicar el campo de aviones comerciales en el mundo, y producirá un desafío ecológico.
Exhibiciones, presentaciones, lanzamientos de nuevos aviones, tecnologías e innovación en el París Air Show 2019 concluyen este fin de semana con un fuerte volumen de negocio, en donde hasta el estado de Querétaro logró cerrar varios avances en temas de empleos. En el evento participan las empresas más importantes del sector no sólo en aviones comerciales sino en equipos de combate de última tecnología, escuelas aeronáuticas e institutos de investigación.
Lo más nombrado
La empresa estadounidense Airbus anunció el lanzamiento de su avión A321XLR de largo alcance, que denominó "el próximo paso evolutivo" en diseño y con un 30% menos de combustible que los de la competencia.
Boeing, de muy bajo perfil en la 53 edición del evento, inmerso aún en la crisis del 737 MAX, llegó bajo la sombra a causa de los dos accidentes que dejaron más de 300 muertos en octubre de 2018, en un vuelo de Lion Air, y el otro en marzo de este año con Ethiopian Airlines, razón suficiente por la que la empresa no vino a competir este año, sino más bien llega a reivindicar su confianza en el mercado.
Tecnologías nuevas
En el evento se propuso un sistema de defensa aeronáutica de nueva generación que no sólo incluye aviones de combate, sino también aviones de radar, satélites y drones, esta es una iniciativa de algunos países para contribuir a que Europa avance en la seguridad aérea y pueda defenderse sin depender de sus aliados. Según Airbus y Dassault, se espera que este sistema esté operando a partir de 2040.
Los aviones funcionarían con baterías, paneles solares y con hidrógeno. En el encuentro de los grandes grupos industriales franceses: Dassault, Tales, Airbus y Azafrán, señalaron que las tecnologías desarrolladas servirán en el futuro a las Fuerzas Armadas.
Para los aficionados hubo simuladores de aviones de varios modelos, la gente hacía largas filas para sentir la adrenalina y ver el espectacular panorama de un piloto a escalas reales. La empresa Lego montó un modelo de avión espacial para que los fans se hicieran fotos y utilizó un stand para que los visitantes más pequeños pudieran crear sus propios modelos en miniatura.
La gente pudo descubrir y conocer cómo son por dentro los aviones que transportan gente y medicina en situaciones de desastre natural, aprovechando las asociaciones que brindan servicios altruistas para recaudar datos de personas que estuvieran interesados y ser reclutados.
De los productos más asombrosos y visitados fueron los misiles, las cámaras de circuito cerrado que permiten ver en los aeropuertos densidades, materiales y los detectores de rostros.
Exhibición final
El Airbus A380, el gigante de los aires, presentó el récord de ser la aeronave comercial con más capacidad del mercado, ya que puede transportar hasta 550 pasajeros y también se consolida como una de las aeronaves más seguras del mundo por ser el avión más cómodo y silencioso.
Los jets y helicópteros también formaron parte de los espectáculos en el aire, dejaron a más de uno sin aliento por realizar caídas en peso muerto quedando suspendidos en el aire.
La Patrulla Acrobática de Francia mostró en los cielos parisinos las suertes “El Cisne”, “La Concorde” y “La Ráfaga”, entre otras formaciones que no tienen otra misión más que exponer los colores galos para que se impriman en la historia y orgullo francés de La Feria Aeronáutica y Espacial más importante del mundo.
