Cuando Bora Milutinovic asumió la dirección técnica de la Selección Mexicana a inicios de 1983, preparaba todo para competir en las eliminatorias rumbo al Mundial de Colombia 86, pero no, el tiempo todo lo cambió, hasta su nacionalidad, pues de yugoslavo se volvió serbio, y de ser un participante, México pasó a ser el equipo anfitrión de la Copa del Mundo.

“El mejor equipo mexicano que he visto... lo digo con todo respeto”, asegura Bora, quien ahora se encuentra en Qatar, como miembro de la federación de aquel país.

“Siempre tengo presente la actuación de la Selección Mexicana en el 86, que logró el mejor resultado, pues ni antes ni después se había ganado el pase a cuartos de final”, dice con su raro acento.

Bora asumió, gracias a sus logros al frente de los Pumas a inicios de los 80. Su posición era envidiable. Además de pasar al Mundial sin tener que calificar, la FMF le dio manga ancha para la preparación. “Tuve tres años de concentración con una gran camada, llena de líderes. Jugamos un total de 64 partidos. El último año fuimos un equipo y se logró un resultado histórico que pudo ser mejor”, pero llegaron aquellos penaltis en Monterrey, contra Alemania Federal.

Asegura que no hubo temor porque la justa se cancelara por el temblor de 1985: “Para nada, México estaba unido. La gente salió adelante gracias a la misma gente, el Mundial estaba seguro”.

La Selección volvió loca a la afición. “Cuando en el juego contra Bélgica, el sonido local falló y todo el Azteca cantó el himno, se me enchinó la piel. Ante ese marco era imposible perder. Ganamos ese partido bien, con goles del ‘Sheriff’ [Fernando] Quirarte y Hugo [Sánchez]... Luego pasó lo de Paraguay [empate a un gol con penalti fallado por Hugo], Iraq, Bulgaria y Alemania fue el quinto... El equipo jugaba casi perfecto”.

Apareció en cuartos de final Alemania y todo terminó: “Es futbol. Se jugó para ganar. No busco pretextos, pero hay una cosa curiosa, los jugadores que mejor tiraban: Tomás [Boy] y Hugo, no estaban en el juego en ese instante”.

Nunca antes, México estuvo tan cerca de acceder a semifinales en una Copa del Mundo. “El público nos reconoció. Fuimos a la cancha a saludar a la gente el día de la final [Argentina-Alemania], esas cosas no se pueden olvidar. No creo que alguna Selección Mexicana haya ganado ese cariño de la gente, por eso digo que esta ha sido la mejor Selección que he visto, pero lo digo... con todo respeto”.

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