Cuando Sergio Pérez arribó al Autódromo Hermanos Rodríguez, su sentimiento fue uno: orgullo. De observar una pista a la altura de cualquier otro gran circuito del campeonato de la Fórmula Uno. De ver a los otros pilotos entusiasmados por estar en su querido México. Además, de que volverá a correr en una pista en la que hace 12 años no pudo hacerlo en lo que fue una de sus últimas carreras antes de salir al extranjero con el sueño de llegar a la categoría reina del automovilismo.

“Es genial escuchar a mis compañeros que estén entusiasmados por esta carrera. Estoy feliz de estar en mi país. Me siento orgulloso de lo que hemos logrado como país. Al caminar por el paddock, pensaba que hemos hecho un gran trabajo en la pista y podemos compararla con cualquier otra del campeonato. El circuito habla por sí solo, ya no puedo aguantar más para correrla. Tenemos una de las rectas más largas, que siempre ayudan a tener una buena carrera. Así que tengo la expectativa de lograr una buena carrera entre todos nosotros los pilotos, que sería algo genial para los aficionados”, expresó ‘Checo’, el volante más alegre del día.

Pérez no esconde una sonrisa que ilumina todo lugar al que llega. La última carrera en el Hermanos Rodríguez no pudo correrla porque retiraron su auto justo antes de la arrancada por un castigo derivado de un choque de una carrera previa. Ahora regresa ya no como un piloto de karts, sino como el único mexicano que competirá en el retorno de la F1 tras 23 años de ausencia.

“Es un sueño el tener la oportunidad de correr en mi país. Han pasado más de 12 años desde la última vez que corrí aquí, así que, definitivamente, va a ser un gran día en mi carrera pues actuaré ante mi gente, ante todo mi país. Saben cómo somos los mexicanos. Por todo esto es que será el día más especial de mi carrera sin importar el resultado que logre este domingo. De verdad deseo conseguir un buen resultado y compartir con los aficionados este esfuerzo”, dijo.

Sergio se encuentra lleno de recuerdos. De cuando se fue a Alemania para empezar a edificar su nombre en seriales europeos con el sueño de llegar a la F1. Ahora suma cinco temporadas en el serial, pero nada de lo vivido se compara a lo que afrontará este domingo.

“Ha sido un gran viaje desde que salí de México para correr fuera de mi país y ahora por fin retorno. En este camino, Carlos [Slim Domit] ha sido un gran apoyo en mi carrera, un verdadero amigo y ambos estamos orgullosos de lo que nos ha tocado dar para que se realice el Gran Premio de México. Pero no sólo nosotros dos, sino que han colaborado bastantes personas, como el mismo gobierno. Son muchos los involucrados en traer esta carrera que me llena de orgullo”.

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