Para los organizadores del Gran Premio de México de Fórmula Uno, la meta en la edición de este año es superar lo realizado en 2015. Para ello, ya empezaron los trabajos de preparación operativa.

“Tenemos el reto de mejorar lo del año pasado, que es una meta difícil lo sabemos. Y es que no queremos igualara lo hecho en el 2015, sino mejorarlo. Queremos ganarnos el premio de nuevo [de Mejor Evento del Año entregado por la FIA]. Para lograrlo debemos mejorar varios detalles en varias áreas de oportunidad que hemos detectado. Queremos mejorar el servicio. No sólo para la gente que viene con la F1, sino para todo el público y los espectadores que nos acompañarán”, expuso Lourdes Skipsey, directora de operaciones del GP de México de F1, en entrevista telefónica.

La pista no sufrirá ninguna adecuación considerable para el Gran Premio mexicano que se realizará del 28 al 30 de octubre.

“En la parte del trazado hay muy pocos cambios. En realidad FIA pidió sólo cambiar algunos lavaderos, pero nada drástico. Hemos estado inspeccionando la pista por el tema del terreno y que no se haya hundido ninguna parte del subsuelo por donde pasa la pista. Tenemos una grata noticia de que no se ha movido nada. El asfalto está en perfectas condiciones, nada que tengamos que arreglar por lo pronto”, apuntó la directiva.

Sobre la construcción del estadio de los Diablos Rojos del México que se construye a un costado de la pista de la Ciudad Deportiva, Skipsey dijo que ha existido una buena coordinación para no afectar la condición de la pista.

“En lo que concierne al tema de F1, no hemos tenido ningún inconveniente. Al contrario, están respetando su área de trabajo y sólo ocupan una parte de la pista para cruzar. Se está cuidando mucho la pista y se protege con triplay y otros materiales para aguantar el peso de los camiones que pasan por ahí. No ha habido ni un caso de hundimientos en dicha zona”, detalló.

El que se celebre las 6 Horas de la Ciudad de México del Campeonato Mundial de Resistencia (WEC, por sus siglas en inglés), programada para el 3 de septiembre, ayuda a la organización del GP de México para afinar detalles.

“La carrera de la WEC nos ayuda para meter presión a nuestra logística para tener todo a tiempo”, comentó Skipsey, que adelantó que no tendrá aumento el aforo de espectadores.

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